No hay que ver las caras de unos y otros, oír los silencios públicos y escuchar las conversaciones a puerta cerrada o detrás de las bambalinas.
Cierto y verdad es que para que todo esto tuviese consecuencias inmediatas tendríamos que estar hablando de algún sucesor de este elemento corrosivo de la política que ocupa La Moncloa desde hace años, y que no esta dispuesto a abandonar su puesto de mando, puesto que es lo único que tiene para sobrevivir a un inmenso cumulo de acontecimientos, lo suficientemente graves, que en cualquier otro país o circunstancia habrían llevado a una dimisión.
Admitiendo esa manera de entender el poder y su ejercicio es como hay que valorar las circunstancias lingüísticas que supone la revelación de correos, de la que solo hemos conocido el principio y de la que se supone que hay muchos mas. Lo difícil es evaluar la importancia de los contenidos desconocidos y si esos son todos o aun el exministro tiene mas material guardado y reservado para próximos asaltos, como todo apunta que así es.
Porque de eso se trata de preservar la integridad de un imputado por diversos delitos cometidos desde nada menos que de el cargo de ministro. Y eso son palabras mayores por mucho que se haya minimizado desde el mismísimo palacio de La Moncloa.
Pero el problema es que lo que esta en riesgo en estos momentos no es ya la libertad de Ábalos, sino la permanencia en el poder de Sánchez, de ahí sus silencios y su falta de reacción ante el repentino descubrimiento de su forma de ser y gobernar.
Cualquier movimiento puede ser peligroso y en Moncloa lo saben, Si el ex ministro ha sido capaz de guardar y grabar en memorias todas las conversaciones entre lideres, hasta ahora solo se han dado a conocer las que menos valor político contienen y además solo afectan a barones ya sin poder.
Así que la consigna es sencilla. Todos quietos, rebajemos la tensión y que no salga nada que pueda llevar al líder a tener que dimitir. Y eso afecta no solo a los socialistas, sino a todos los demás que de alguna manera viven pegados al hoy poderoso Sánchez, es decir amigos , amiguetes asociados y demás personajes que pasaban por allí y que fueron premiados con un cargo, un consejo o similar y viven de ello.
Pero de momento lo que su se ha visto a las claras es que los nervios están a flor de piel