Los expertos del banco americano también han elevado 3 dólares su previsión para el precio en 2024, hasta 100 dólares por barril. «La OPEP+ tiene un poder de fijación de precios muy significativo en relación con el pasado, y el recorte sorpresa es coherente con su nueva doctrina de actuar de forma preventiva, porque pueden hacerlo sin pérdidas significativas en la cuota de mercado», han explicado los expertos de Goldman.
Además, asumen que «los recortes de Rusia se extenderían hasta el segundo semestre de 2023″, por lo que han reducido su pronóstico de producción para la OPEP+ para fines de 2023 en 1,1 millones de barriles diarios (mb/d)». «Esta decisión choca con las expectativas del mercado, que estaba esperando que los países productores mantuviesen un tono duro, pero sin decidir aún nuevos recortes de la oferta, a la espera de ver si el precio del crudo recuperaba niveles con los que se sintiesen cómodos (80 dólares por barril como suelo)», explican los expertos de Renta 4.
«La decisión se toma tras las recientes caídas a mínimos de más de un año a raíz del empeoramiento de expectativas cíclicas ante la inestabilidad financiera y su potencial impacto en crédito y por derivada en la actividad económica», añaden. En su opinión, «supone un nuevo riesgo al alza sobre la inflación (y por tanto presión adicional sobre los bancos centrales) y a la baja sobre el crecimiento».
A nivel geopolítico, la decisión de la OPEP vuelve a poner de nuevo de manifiesto la cada vez más estrecha relación entre Arabia Saudí y Rusia, pese a las presiones de Estados Unidos.