Este rendimiento le ha permitido alcanzar una cartera de proyectos superior a los 1.000 millones de euros, consolidando su posición en un entorno complejo y altamente competitivo. La junta general de accionistas de Lantania ratificó las cuentas de 2024. La cifra de negocios del Grupo alcanzó los 393 millones de euros, un incremento cercano al 5% frente a los 375 millones de euros del ejercicio anterior.
La demora en el inicio de varios proyectos ha desplazado a 2025 parte de la actividad prevista. La facturación se quedó a las puertas de superar los 400 millones de euros debido al retraso en el arranque de algunos grandes desarrollos, cuyos contratos se han formalizado a comienzos de este año, como la desaladora de Ras Mohaisen en Arabia Saudí. Por su parte, el resultado bruto de explotación (EBITDA) se situó en 13,1 millones de euros, mejorando un 5% respecto a los 12,5 millones registrados el año anterior.
En el plano financiero, sobresale la diversificación de sus fuentes de liquidez mediante la primera emisión de pagarés en el MARF, por un importe vivo de hasta 50 millones de euros.
La división de Energía lideró la contratación del Grupo, concentrando el 37% del total, lo que refleja el compromiso de la compañía en la generación renovable y su contribución a la mejora de la red de transmisión eléctrica. En 2024, esta área firmó contratos por un valor cercano a los 200 millones de euros, entre los que destacan las infraestructuras de evacuación de los parques solares del nudo de Tordesillas (60 millones), la construcción de la primera subestación eléctrica del Puerto de Valencia más la incorporación de 138 MW en tres plantas de generación solar-fotovoltaica.
El negocio de Agua consolidó un crecimiento significativo, representando el 20% de la contratación. Los proyectos de mayor envergadura incluyen el complejo de tratamiento de biosólidos en NEOM (Arabia Saudí), por valor de 77 millones de euros, la ampliación de la EDAR de Villanueva de la Torre (Guadalajara) y la planta de tratamiento de aguas industriales para Falait, en Argelia. Para el área de grandes proyectos de agua, 2024 ha representado su completa consolidación alcanzando una cartera superior a los 430 millones de euros.
La división de Infraestructuras, con una contribución del 15% al total, avanzó con contratos relevantes como la segunda fase del complejo ferroviario de Valladolid, por 61 millones de euros, que realiza en consorcio con Copcisa, y la renovación del enlace entre la autovía A-4 y la SE-20 en Sevilla, una ejecución valorada en 26,3 millones de euros.
En el área de Edificación, el 19% de la contratación se tradujo en proyectos como la construcción de 200 viviendas (130 en Valdebebas y 70 en Córdoba) con un presupuesto de 30 millones de euros, ejecutada por Gestilar Construcciones, y la edificación del Tribunal de Apelación de Lodz, en Polonia, por 25 millones, a cargo de Balzola Polska.
Por último, Servicios aportó el 9% restante, destacando la renovación del contrato para la conservación del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid‑Barajas, por un valor de 14,4 millones de euros para los próximos dos años, así como uno de los contratos de conservación de la jardinería, arbolado y espacios verdes del Ayuntamiento de Sevilla, por 10 millones de euros.
A su vez, la expansión internacional ganó impulso, alcanzando el 31% del volumen de contratación en el exterior, frente al 23% del ejercicio anterior, con presencia creciente en Arabia Saudí y Polonia.