En concreto, la multinacional que preside Pérez ha encomendado a BNP Paribas, HSBC y Société Générale preparar una emisión de 500 millones de euros con vencimiento en 5 años, según informa ‘Bloomberg’. El bono será emitido por ACS bajo su programa de emisiones listado en el mercado regulador de Dublín por un importe total de hasta 1.500 millones de euros.
La deuda bruta total de ACS ascendía a finales del año pasado a 13.200 millones de euros, un 39% a través de bonos. En torno a 2.800 millones vencen este año y cerca de 4.700 millones tienen una fecha de vencimiento superior a 2028.
En cuanto a FCC Aqualia, se trata de otro bono de 500 millones de euros, en este caso ‘verde’ y encomendado a BBVA, CaixaBank y Société Générale como coordinadores globales y a Crédit Agricole, HSBC, IMI-Intesa Sanpaolo, ING y Santander como ‘bookrunners’.
La emisión de Aqualia, empresa participada al 51% por FCC y al 49% por IFM y dedicada a actividades de agua, tendrá un vencimiento de 7 años, cuyo objetivo es financiar nuevos proyectos bajo su marco de financiación verde. En concreto, este plan incluye proyectos como estaciones de tratamiento de agua, alineados con los objetivos de descarbonización de la Unión Europea.