En la rueda de prensa conjunta que han ofrecido para presentar los datos de paro y afiliación del mes de junio, Pérez Rey ha subrayado que las reformas estructurales llevadas a cabo por el Gobierno están dando sus frutos tanto en creación de empleo y en la mejora de su calidad, como en reducción del paro registrado. De hecho, el secretario de Estado de Trabajo ha recalcado que hay que remontarse a 2008 para encontrar una cifra total de paro registrado tan baja como la de junio, de 2.400.000 desempleados, lo que supone 600.000 desempleados menos que en 2019, cuando comenzó la andadura del Gobierno progresista.
«El mercado de trabajo está funcionando de manera oportuna pese a la incertidumbre internacional y pese a todo el ruido que acompaña a la política en estos días. Éste es un ejemplo de gestión, es un ejemplo de cómo, si las cosas se hacen bien, benefician a los trabajadores de este país, y es un ejemplo de por qué merece la pena estar en el Gobierno, precisamente para garantizar más empleo, de mayor calidad y que, además, beneficie a jóvenes y mujeres, que han sido normalmente los grandes olvidados de nuestro mercado de trabajo», ha defendido.
Pérez Rey ha apuntado que la disminución del paro registrado se está fundamentando además en contratos indefinidos. «Tradicionalmente en nuestro país junio era un monocultivo de la temporalidad. Se creaba empleo vinculado básicamente los oficios relacionados con el verano y esas contrataciones tenían un poderosísimo componente efímero de temporalidad, muchas veces de temporalidad indeseada. Este junio de 2025 los efectos de la reforma laboral vuelven a ser muy significativos y los contratos indefinidos suponen más del 39% del conjunto de contratos», ha resaltado. Pérez Rey ha indicado que hasta la reforma laboral de 2021 no se hacían contratos indefinidos en los meses de verano, sino que todo el flujo de contratación caminaba de la mano de la temporalidad, que suponía al menos el 90% de los contratos realizados cada mes. Ahora, ha resaltado, la contratación temporal «se ha desplomado» y se han formalizado menos de un millón de contratos.
«Más empleo que nunca reposando en menos contratos que nunca. Y este es un indicador muy clave de la calidad del empleo en nuestro país (…) La reforma de 2021 ha logrado mantener la estabilidad de los contratos. Es decir, no ha sido una especie de efecto gaseosa de reducción momentánea de la precariedad, sino que está dando lugar a un cambio en la estructura, en la composición del mercado de trabajo que hace que la contratación indefinida tenga una enorme preponderancia», ha señalado Pérez Rey. El ‘número dos’ de Trabajo ha hecho también hincapié en el descenso del paro femenino hasta niveles desconocidos desde junio de 2008 y en la reducción de la brecha salarial en casi un punto y medio entre 2022 y 2023, hasta su cifra más baja de la serie histórica, dato que ha atribuido a la subida del salario mínimo interprofesional (SMI).
Asimismo, Pérez Rey ha destacado el descenso del paro juvenil a mínimos históricos, con 166.707 desempleados menores de 25 años al finalizar junio, dato que contrasta con los 450.000 jóvenes en paro que se llegaron a tener en la crisis financiera. En su opinión, esto demuestra que las políticas activas, cuando «se empeñan de forma decidida en abordar el problema del paro juvenil», dan resultados. Además de este grupo de edad, Trabajo tiene puesto el foco en los mayores de 52 años, para los que espera empezar a discutir «pronto» una estrategia en el diálogo social para seguir recortando su cifra de paro e impulsar las oportunidades laborales.
Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social y Pensiones, Suárez, ha destacado que España está viviendo un periodo «extraordinario de crecimiento del empleo que no tiene precedentes por su duración y por su intensidad» y por «la mejora extraordinaria de la calidad del empleo». Suárez ha subrayado que desde la aprobación de la reforma laboral de 2021 se han creado 1,8 millones de empleos en España, un resultado que ha calificado de «verdaderamente impresionante y muy difícil o imposible de anticipar en aquel momento».
El secretario de Estado de Pensiones ha resaltado además que el crecimiento de la afiliación en más de 76.000 personas en junio, «a pesar de todas las dificultades del entorno internacional», sigue evidenciando el dinamismo del mercado laboral.
Suárez ha puesto además el acento en el récord de afiliación femenina y de trabajadores autónomos, en la mejora de la calidad del empleo, y en el crecimiento del empleo en sectores de alto valor añadido, como información y comunicaciones y actividades científico-técnicas, con un repunte en el último año superior al de la hostelería. Preguntado por la tímida subida de la afiliación media femenina en junio, con sólo 1.000 afiliadas más de un total de 76.700 nuevos afiliados, Suárez ha indicado que junio no suele ser el mejor mes para el empleo femenino y ha señalado al respecto que el año pasado se incrementó en 8.000 afiliadas y el anterior en 4.000. Así, ha considerado que no es un dato «particularmente llamativo» y que no se puede hablar de ralentización en la creación de empleo femenino.
Sobre la pérdida de 186.000 afiliados el último día del mes de junio, Suárez ha apuntado que ésta ha sido menor que la registrada otros años, pues en 2021 se produjeron 231.000 bajas, en 2022 más de 235.000 y en 2023 fueron 264.000. «Lo que estamos viendo es que, efectivamente, se siguen produciendo esas oscilaciones por diversos factores, pero lo que sí constatamos es que esas oscilaciones son cada vez menores (…) Es una caída que poco a poco se va mitigando. Lo vemos a principios y a final de mes, y al principio y al final de semana», ha indicado.
Además, ha asegurado que cuando este dato se pone en relación con otros elementos, como el número de contratos que se realizan, el nivel de rotación es «más pequeño» porque cada vez hay más estabilidad en el empleo.
Preguntado por si el nuevo reglamento de extranjería ha impactado ya en junio en la afiliación de los trabajadores extranjeros, Suárez cree que aún es pronto para que exista un impacto directo, aunque sí ha constatado que la dinámica de afiliados foráneos está siendo «muy positiva». Sobre la reforma de la jubilación flexible, el secretario de Estado ha recordado que en el decreto sobre jubilación parcial y activa se incluyó una disposición que mandataba al Gobierno a llevar al diálogo social y a aprobar un nuevo marco de regulación.
«Cuando hablamos de jubilación flexible hablamos de las situaciones, por decirlo de una manera expresiva, de reenganche. Alguien que ya está jubilado y que vuelve al mercado de trabajo. Se ha avanzado mucho en una nueva regulación. Es un decreto, una norma de rango reglamentario que previsiblemente confiamos en poner o iniciar la tramitación en fechas próximas y que viene a completar el marco, la panoplia de opciones que se abren a los trabajadores o a los pensionistas de participar en el mercado de trabajo», ha comentado.