Las tres dispensas permiten, como se describirá en el folleto de la operación, compatibilizar los plazos previstos en la normativa estadounidense con la normativa española respecto a la entrada en vigor del folleto americano y la posibilidad de renuncia a la condición de aceptación mínima, de conformidad con el régimen establecido por el Real Decreto 1066/2007.
La tercera dispensa permite alinear plazos si se produce un ajuste de la contraprestación contemplado en la oferta y derivado de un eventual pago de dividendo por parte de Banco de Sabadell durante el período de aceptación.
En su misiva a la SEC, BBVA explica que renunciará a la condición de aceptación mínima únicamente si el número de acciones de Banco Sabadell ofrecidas y no retiradas en la oferta permite a BBVA adquirir al menos el 30% de los derechos de voto de las acciones de Banco Sabadell al final del plazo de aceptación. De acuerdo con la legislación española, BBVA estará obligado a lanzar una OPA obligatoria en el plazo de un mes tras la liquidación de la oferta si adquiere acciones de Banco Sabadell que representen el 30% o más (pero menos del 50%) de los derechos de voto de Banco Sabadell tras la finalización de la oferta.
El folleto de la oferta informará de que BBVA puede renunciar a la condición de aceptación mínima, describirá el procedimiento para renunciar a dicha condición según la legislación española y analizará en detalle el posible impacto de la renuncia a esta condición.
Las condiciones impuestas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la autorización del Consejo de Ministros someten a BBVA y Banco Sabadell a determinados compromisos y limitaciones, y el folleto de la oferta advertirá a los accionistas de que no ofrezcan sus acciones de Banco Sabadell si su disposición a participar en la operación se viera afectada por una exención de la condición de aceptación mínima.
Respecto del calendarios, la opa comenzará el 8 de septiembre y finalizará el 7 de octubre. Así lo ha confirmado el banco vasco este viernes en una presentación enviada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En dicha presentación, BBVA ha señalado que prevé alcanzar unas sinergias de 900 millones de euros, aunque en 2029, con un año de retraso frente a la previsión inicial. Esta cifra supera en 50 millones de euros a la estimación inicial de 850 millones, y está compuesta por 835 millones de euros en sinergias de costes más 65 millones adicionales en sinergias de financiación.
BBVA estima que, en 2027, las sinergias serán de 175 millones, mientras en 2028 se conseguirán 235 millones y en 2029, cuando la entidad espera completar la fusión con Sabadell, se alcanzarán otros 490 millones.