El presidente Powell explicó que el doble mandato de la Fed —estabilidad de precios y pleno empleo— se encuentra actualmente «en tensión». Pero, ¿se trata de una tensión real entre los dos objetivos o de un mensaje poco coherente?
En nuestra opinión, los dos objetivos de la Fed no son contradictorios. Por el contrario, un mercado laboral más débil debería contribuir, con el tiempo, a la desinflación de los servicios, reduciendo los riesgos de un repunte de la inflación. Además, si, como sugiere Powell, el reciente aumento de los precios de los bienes es un factor temporal relacionado con la introducción de nuevos aranceles —y no el resultado de un auge de la demanda que supera a la oferta, como ocurrió en 2021—, cabría esperar un retorno a la normalidad ya en 2026, con una desaceleración de los precios de los bienes.
La realidad detrás del mensaje de la «tensión del doble mandato» es que el presidente de la Fed también actúa como portavoz de las posiciones a menudo divergentes de los 19 miembros del FOMC en materia de crecimiento, inflación y mercado laboral. En este contexto, creemos que las preocupaciones por la inflación son excesivas, mientras que los riesgos de desaceleración del mercado laboral son más concretos.
En consecuencia, seguimos esperando dos recortes más de los tipos en 2025, en línea con la mediana de los «dot plots» publicados en septiembre. De cara a 2026, y en ausencia de una nueva aceleración del empleo, se considera probable una estabilización del tipo de los fondos federales por debajo de las proyecciones medias actuales, situándose en un rango objetivo de entre el 2,75 % y el 3,00 %. Esto implicaría recortes adicionales de 75 puntos básicos a lo largo de 2026.