Han mejorado la oferta un 10%. Ayer la CNMV dio el visto bueno. ¿Usted cree que será suficiente para conseguir el 50% del capital del Sabadell?
Vamos a superar el 50%. Estamos absolutamente convencidos de ello porque es una oferta excepcional. Lo era en origen, incorporando una prima muy importante, mucho más alta, mucho más elevada que la de otras operaciones exitosas en Europa. Y con la mejora lo es aún más. Además, también con la subida del valor de nuestras acciones, porque es una oferta en acciones. Si miramos la oferta hoy, su valor es más de un 60% superior al valor que tenía cuando la lanzamos. Y no solamente es el valor de la oferta. Es una oferta que valora Sabadell en unos valores históricos, en máximos: 17.000 millones de euros de valor y un precio por acción de 3,39 €. Cuando iniciamos este proceso, en las primeras conversaciones, el Sabadell cotizaba a 1,45; 1,45 contra 3,39 del valor de la oferta mejorada el lunes pasado. Y más allá de la oferta, el atractivo también para el accionista del Sabadell, al que invitamos a unirse. Le invitamos a unirse a un proyecto que es el proyecto líder en rentabilidad en Europa, líder en crecimiento en Europa y, por tanto, también un proyecto que genera valor. Invitamos al accionista de Sabadell a participar de ese valor que creamos conjuntamente. Y todo ello lleva a que la perspectiva de beneficio por acción para el accionista del Sabadell es un 41% superior tras la fusión frente a un Sabadell en solitario. En definitiva, que vamos a superar el 50%. Estamos convencidos de ello por lo excepcional de nuestra oferta.
¿Podría decirnos qué porcentaje llevan ya de aceptación?
Los accionistas institucionales han mostrado un apoyo generalizado, pero su aceptación formal se reporta por parte de los custodios y sus custodios internacionales solamente al final del proceso. Los accionistas particulares están ya aceptando directamente la oferta. No damos cifras todavía porque son muy preliminares, dado que muchas de las aceptaciones también tienen lugar en otros bancos y tiene que ir llegando esa información. Pero sí que puedo confirmar que están viniendo accionistas de Sabadell y clientes de Banco Sabadell a canjear sus acciones, a aceptar la oferta en BBVA, en nuestras oficinas
P. Nos ha dicho que van a superar el 50%, así que la posibilidad de no alcanzar el 30% en este primer periodo, ¿no la contemplan?
Bueno, como he dicho, estamos convencidos, absolutamente convencidos de que superaremos el 50% en la operación y, por tanto, no contemplamos esa otra posibilidad.
Entonces, la probabilidad de que haya una segunda OPA, ¿no está encima de la mesa?
Gracias por la pregunta, porque se están diciendo muchas cosas que están generando confusión. Lo cierto es que esa supuesta segunda OPA es muy incierta, porque en el escenario de que estamos absolutamente convencidos de superar el 50% no se produce. Pero incluso en el caso de que estemos entre un 30% y un 50%, depende enteramente de la voluntad de BBVA de renunciar a la condición de aceptación mínima del 50%, precisamente. Es verdad que tenemos la posibilidad legal de renunciar a esa condición. Pero, como recoge bien el folleto, no tenemos ninguna intención de hacerlo.
Entonces, en su opinión, para el accionista que en este momento se está pensando si es mejor aceptar la oferta ahora o esperar a esa hipótesis de una segunda OPA, ¿qué le diría?
De nuevo, sobre esto se ha hablado mucho y se han dicho cosas que generan confusión. Lo cierto es que el accionista debería aceptar la oferta ahora. No tiene ningún sentido esperar. Y no lo tiene porque esa hipotética, incierta segunda OPA no tiene ningún atractivo frente a la oferta que sí que hoy existe una oferta excepcional. Y no lo tiene, no lo tiene en precio, no lo tiene en plazo, no lo tiene en fiscalidad. Empezando por el precio: la hipotética segunda OPA, que se daría, repito, solo en caso de que BBVA decidiera avanzar y renunciar a la condición, sería al mismo precio que la oferta actual, siempre, porque sería al contravalor en efectivo de la oferta que hemos presentado. Y BBVA nunca renunciaría a la condición y, por tanto, nunca procedería a esa segunda OPA si el precio no es el mismo. En definitiva, que aquí no hay nada que ganar con esperar. En plazo, tampoco. Si la oferta hipotética tardaría unos meses en ser efectiva porque hay que tramitarla y, en cambio, la oferta actual se puede aceptar ya. ¿Por qué esperar unos meses para aceptar una oferta que puedes aceptar ya? Y en fiscalidad, pues lo mismo. No hay ninguna ventaja, todo lo contrario. Esa hipotética segunda OPA, al ser en efectivo, tributaría. El accionista en España tributaría por las plusvalías, al ser una OPA en efectivo. En definitiva, que no tiene ningún sentido esperar. Lo que tiene sentido es que los accionistas interesados, los que aprecien esta unión, acudan cuanto antes a canjear sus títulos. El plazo es ahora, hasta el 10 de octubre. No hay tiempo que perder. Les invitamos y abrimos nuestras puertas para que puedan hacerlo de una manera sencilla, sin coste, en BBVA. Y, de nuevo, les invito a que lo hagan a la mayor brevedad.
Durante este proceso, Sabadell garantizó a sus accionistas que, si seguía en solitario, tras la venta de la filial TSB ya repartiría 2.500 millones de dividendos ordinarios. No sé si BBVA tiene alguna medida o piensa cómo contrarrestar esta posibilidad de recibir una retribución extraordinaria.
Lo primero que diría es que un dividendo no genera valor. Es la distribución a los dueños, los accionistas, de algo que ya es suyo. El valor del dividendo está recogido ya en el precio de la acción. Está recogido también en la oferta que hemos presentado a los accionistas de Banco Sabadell. Lo que ocurre cuando se paga un dividendo es que el mercado corrige a la baja el precio. Es decir, el precio incorpora el dividendo; cuando el dividendo se paga, el precio baja en el importe del dividendo, porque lo que estás es repartiendo lo que ya era tuyo. Eso no es lo relevante. Lo que es relevante es la capacidad de generación de dividendo futuro, no la distribución del que ya se ha generado. Y ahí, repito de nuevo lo que ya he comentado: la unión nos permite crear valor conjuntamente y, dado lo atractivo de los términos de canje para el accionista del Banco Sabadell, la perspectiva es de un beneficio por acción para el accionista del Sabadell que es más de un 41% superior al beneficio por acción que tendrían los accionistas del Sabadell en el Banco Sabadell en solitario.
Por mi parte, no sé si quiere hacer un mensaje final para los accionistas de Sabadell. ¿Qué les diría?
Pues sí. Les diría a los accionistas de Sabadell que la oferta que tienen encima de la mesa es una oferta excepcional. Lo es por la oferta en sí misma y lo es por el proyecto al que se unirían: el proyecto que ya hoy es líder en rentabilidad en Europa, que ya hoy es líder en crecimiento en Europa y que, con la unión, tenemos la capacidad de generar más valor conjuntamente. Valor del que se beneficiarían los accionistas del Banco Sabadell con un incremento del 41% del beneficio por acción, que es el determinante del dividendo por acción. En definitiva, es unirse a un proyecto que les va a generar una fuente de dividendo futuro muy superior a quedarse en la alternativa, que sería no canjear las acciones, seguir siendo accionista de un Banco Sabadell que será un banco más pequeño, especialmente después de la venta de TSB, será un banco menos diversificado, también tras esa venta. Es decir, un banco con todos los huevos en la misma cesta, esa es la comparativa que tienen que hacer en el contexto en el que Europa, además, necesita bancos con el tamaño y la eficiencia suficiente o necesaria para afrontar los retos que tenemos por delante. Le diría también a aquellos accionistas que son clientes del Banco Sabadell, o los que son clientes particulares, les diría que la unión permitirá que tengan una red de oficinas de más del doble de la que tienen hoy, una red de cajeros de casi el triple y, por supuesto, los mismos gestores de siempre, con la misma cercanía de siempre. Y a los que son clientes pyme, les diría adicionalmente, les recordaría, el compromiso que ha asumido BBVA de mantenimiento de crédito a cinco años, que es un compromiso que no le da nadie. En definitiva, que a todos ellos, sean clientes o no sean clientes, a todos los accionistas de Banco Sabadell les invitaría a que aceptaran nuestra oferta excepcional, que el momento es ahora, hasta el 10 de octubre. Que no hay tiempo que perder, que no lo dejen para el final y que nuestras puertas están abiertas para recibir, sin coste ninguno y con todas las facilidades, sus aceptaciones en cualquier oficina del banco, a través del teléfono o a través también de los canales digitales.