Los arrestos tuvieron lugar la noche del sábado en el departamento de Sena-Saint Denis, al norte de París, tras conocerse que uno de los implicados, que ya se encontraba en el aeropuerto Roissy-Charles de Gaulle, planeaba huir a Argelia. El otro sospechoso detenido tenía previsto huir a Mali. Según fuentes policiales, ambos detenidos, cuentan con antecedentes y podrían haber actuado por encargo, en una operación minuciosamente planificada que involucró un pequeño camión con plataforma elevadora y sierras eléctricas para forzar vitrinas en la emblemática galería de Apolo.
En el momento de la detención, se incautaron teléfonos móviles, una suma considerable de dinero en efectivo y prendas presuntamente utilizadas durante el robo. Permanece abierta la investigación para identificar al resto del grupo y localizar el botín, mientras los detenidos han sido puestos bajo custodia policial y están siendo interrogados por la policía.
Según la ley francesa, estos primeros interrogatorios pueden prolongarse durante 96 horas.
El trabajo de la policía científica ha sido una de las claves, ya que encontró muchos indicios de ADN y otro material en los objetos y prendas abandonadas por los ladrones después del robo.
