La Cámara de Representantes había aprobado la medida previamente con 222 votos a favor y 209 en contra. El texto garantiza el funcionamiento del Gobierno hasta finales de enero de 2026.
Antes de firmar, Trump señaló que “los demócratas intentaron extorsionar a nuestro país” y aseguró que “los republicanos nunca quisieron un cierre”, según informa ‘CNBC’. También lamentó que “la gente salió muy lastimada”, en referencia al más de un millón de trabajadores federales suspendidos y al impacto en los servicios públicos.
El cierre comenzó el 1 de octubre, cuando los demócratas del Senado se negaron a apoyar una ley de financiación que no incluyera la extensión de los créditos fiscales reforzados de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA). El domingo, parte del grupo demócrata aceptó respaldar un nuevo texto pese a que no incorporaba esta ampliación. El Senado lo aprobó el lunes por la noche, alcanzando el mínimo de 60 votos gracias al apoyo de siete demócratas y un independiente. El acuerdo incluye permitir a los demócratas una votación en diciembre para tratar de extender esos subsidios, que expiran a finales de mes.
La Oficina de Administración y Presupuesto ordenó a los empleados federales volver a sus puestos este jueves. La ley también revierte todos los despidos relacionados con el cierre y asegura que los trabajadores recibirán el salario íntegro que habrían cobrado sin la paralización. Aún no se sabe cuándo se efectuarán todos los pagos, aunque se espera que sigan un calendario similar al del personal de la Cámara, que cobrará el martes.
El Departamento de Transporte congeló los recortes de vuelos aplicados por la falta de controladores durante el cierre. Hasta el martes, un 6% de los vuelos programados estaban cancelados, una cifra que se esperaba que llegara al 10% el viernes.
En la Cámara solo dos republicanos votaron en contra —Thomas Massie y Greg Steube— y seis demócratas también rechazaron la ley. Durante el debate, la representante Rosa DeLauro advirtió de que algunas primas de seguros médicos podrían “duplicarse o incluso triplicarse” sin la protección de los subsidios adicionales de la ACA. Afirmó que en 2026 “más de 2 millones de estadounidenses perderán sus planes de salud porque es simplemente demasiado caro”.
La ley también financia el programa SNAP, que da asistencia alimentaria a 42 millones de estadounidenses. La Administración Trump había intentado suspender estos beneficios en noviembre y se negó a utilizar fondos adicionales para cubrir completamente las prestaciones del mes. El Tribunal Supremo había suspendido una orden que obligaba al pago íntegro hasta este jueves, dando tiempo al Congreso a resolver la cuestión con la nueva legislación.
El acuerdo incorpora además disposiciones para un proceso presupuestario bipartidista y limita el uso de resoluciones continuas para financiar el Gobierno
