Este comportamiento responde a la tendencia del consumidor a efectuar cestas más pequeñas y aumentar la frecuencia de visitas con el objetivo de controlar el gasto, en un contexto de confianza aún por debajo de niveles prepandemia e influencia de la inflación.
Según Gonzalez de Advanced Analytics “el consumidor acude más veces a comprar, lo que representa una oportunidad tanto para marcas como para distribuidores. El reto está en entender el rol de cada categoría, marca o retailer en las distintas tipologías de cesta y adaptar la estrategia para captar más actos de compra, especialmente en las cestas más pequeñas y frecuentes”.
Lo habitual es que la primera compra del día concentre la mayor parte del gasto, con un promedio de 22 euros y seis categorías, mientras que la segunda cesta -de carácter complementario- registra un gasto medio de diez euros y alrededor de tres productos. Entre los principales motivos para esa segunda visita figuran el surtido (más del 60% de los casos), la cercanía por olvido, urgencia o necesidad puntual (14%) y la búsqueda de mejores precios o promociones (9%). Las categorías más buscadas por surtido incluyen legumbres, carne, productos de cuarta gama, galletas y snacks; mientras que en la búsqueda de precio destacan refrescos, café, chocolate, embutidos y quesos.
Mercadona se caracteriza por atraer cestas únicas en días distintos, mientras que DIA y las cadenas regionales destacan en compras complementarias en una misma jornada. El análisis por enseñas muestra diferencias en el rol que desempeñan. Por ejemplo, Mercadona se caracteriza por atraer cestas únicas en días distintos, mientras que DIA y las cadenas regionales destacan en compras complementarias en una misma jornada. En estas cestas, la marca de fabricante alcanza un peso del 47%, cuatro puntos por encima de la media.
Esta tendencia de realizar varias visitas en un mismo día se inscribe en un patrón más amplio: los hogares visitan más tiendas que hace tres años, generando más de 2.200 millones de actos de compra en 2025. Se trata de un fenómeno presente en todas las regiones y tipos de hogar, con mayor incidencia en jóvenes y seniors. La excepción son los hogares con hijos, donde la falta de tiempo limita la frecuencia de compra. Todos los canales se ven impactados, incluidos los hipermercados, aunque en menor medida.
El incremento de visitas también ha impulsado el crecimiento de las cestas de necesidad inmediata y proximidad, responsables del 90% del aumento en los actos de compra. La diferencia de gasto entre tipologías es notable: una cesta promedio ronda los 18 euros, mientras que las más pequeñas se sitúan entre seis y 13 euros. Además, la carga media por acto se reduce en todas las tipologías, especialmente en las cestas grandes, que pasan de 17 a 16 categorías.
