La decisión sobre los tipos de interés y los comentarios sobre la situación de la economía y del mercado laboral estadounidense serán los catalizadores del mercado a corto plazo. Pero lo cierto es que no ha hecho falta esperar al anuncio oficial para ver un reposicionamiento por parte de grandes gestoras en los mercados de bonos. Los datos semanales de empleo y del PCE conocidos a finales de la semana, volvieron a evidenciar la buena salud de la economía estadounidense, circunstancia que está provocando un repunte significativo de la rentabilidad de la deuda, especialmente en los tramos largos de la curva. El fuerte aumento de emisiones tanto públicas como privadas (financiación de las inversiones en IA y de los déficits públicos) se están concentrando en los tramos medio y largo de la curva, circunstancia que está llevando a los inversores a demandar una mayor prima por prestar a mayor plazo. Además, parece que se está volviendo a instaurar el pensamiento de que los tipos de interés podrían estar elevados.
Parece bastante previsible que la FED va a bajar 25 puntos básicos (pbs) el tipo de interés en su reunión de hoy, miércoles día 10, pero lo que ha cambiado son las previsiones de cuanto y cuándo volverá a actuar en el futuro. Ya habíamos comentado que el mercado descontaba hasta 50 pbs más en bajadas a lo largo de 2026 de lo que estaba sugiriendo la FED, y que cualquier noticia macroeconómica positiva podría provocar el reajuste de estimaciones, circunstancia que se está produciendo desde hace varias sesiones. En cualquier caso, la evolución de los datos podría devolver el movimiento en cualquier momento, especialmente si la situación se complica en el mercado laboral o se anticiparan caídas importantes del consumo.
Los mercados de renta variable volvieron a registrar subidas generalizadas, aunque en esta ocasión menos exuberantes con la excepción del Ibex 35 que se anotó un +1,93%, y marcaba un nuevo máximo histórico en los 16.844,50 puntos tras los buenos resultados y las nuevas previsiones de Inditex. En Estados Unidos el S&P 500 subía un 0,31% y cerraba la semana en 6.870,40 puntos, mientras que el Nasdaq 100 lo hacía en 25.692,05 puntos con una ganancia de un 1,01%. En Europa el Euro Stoxx 50 subía un 0,97% para terminar en 5,723,93 puntos.
Los bonos gubernamentales vieron subir considerablemente su rentabilidad a lo largo de la semana, por los cambios de expectativas ya comentados, movimiento que ha continuado en la sesión del lunes. El Treasury con vencimiento a 10 años subió 12 pbs para terminar con una rentabilidad del 4,14%. La deuda europea arrastrada por la estadounidense, también veía aumentar su rentabilidad por encima del doble dígito, así, el Bund cerraba con una rentabilidad del 2,80% y el Bono lo hacía en el 3,27% (3,35% al cierre del lunes).
En los mercados de activos reales vimos como el oro cedía mínimamente (-0,28%) al cerrar en 4.243 USD/Onz, cotizando que los tipos de interés no vayan a bajar tanto ni tan rápido como se esperaba. Por lo que respecta a la plata, volvía a subir notablemente y marcaba nuevos máximos históricos para cerrar en 59,05 USD/Onz o un +2,69%. Este activo recientemente ha visto como se mejoraba notablemente el precio objetivo al ser uno de los minerales más indispensables para el desarrollo de la energía fotovoltaica y de las baterías. Por su parte el Brent subía un 0,87% hasta los 63,75 USD/b en una semana en la que el USD volvía a ceder frente a las principales divisas.
La macroeconomía en Europa no dejo buenos datos, pero tampoco los podemos considerar como pesimistas.
• el PMI manufacturero cedía hasta 49,6 mientras que el PMI de servicios subía a 53,6
• el IPC subía una décima hasta el 2,2%
• la tasa de desempleo se incrementaba en una décima para situarse en el 6,4%
• las ventas minoristas no experimentaron cambios en noviembre
• se confirmó el crecimiento del 1,4% del PIB en el 3Q25
En Estados Unidos:
• se vio el mismo comportamiento en los PMIs, pero el sector manufacturero se encuentra en terreno de expansión en 52,2
• el PCE de septiembre se situó en el 2,8%, mismo nivel que el dato subyacente y totalmente en línea con las previsiones
• el PIB previsto por la FED de Atlanta para el 4Q25 corrigiendo hasta el 3,5%
• mejoran las estimaciones de la Universidad de Michigan, tanto a nivel consumo como en inflación prevista.
Durante la presente semana el mercado estará pendiente de la decisión de la FED (bajará 25 pbs el tipo de interés), y prestará una atención especial a sus previsiones económicas y al lenguaje con el que expongan sus argumentos para justificar la decisión tomada, mensaje que podría indicar el camino de los futuros movimientos del organismo.
La otra publicación relevante de la semana la conocimos el lunes, fueron los datos de las exportaciones e importaciones chinas del mes de noviembre, las primeras mejoraron las previsiones (+5,9%) y las segundas se quedaron por debajo (+1,9%), lo que ha permitido situar el superávit por balanza comercial por encima de los 111Bn de dólares, claramente por encima de los 90Bn de los dos meses anteriores. China no despega, pero con estos datos no parece que su economía vaya a empeorar.
