Sin embargo, el beneficio bruto de explotación, Ebitda, bajó un 4,2%, hasta 1.981 millones de euros. La razón fue que el Ebitda de la división de energías renovables, Acciona Energía, fue de 1.285 millones de euros, lo que supone un descenso del 22% frente al año anterior por el menor precio de la electricidad en España. En positivo, el Ebitda de la división de Infraestructuras subió un 49,3%, hasta 551 millones de euros.
«La cuenta de resultados de la compañía refleja la buena evolución del negocio de Infraestructuras, el cumplimiento de los objetivos anunciados por Acciona Energía y el impacto de la consolidación por integración global de Nordex y de Renomar, en las que el grupo alcanzó participaciones mayoritarias el año pasado», ha explicado Acciona en nota de prensa.
«La compañía cerró el año con una deuda financiera neta de 6.551 millones de euros, lo que representa una ratio deuda neta/EBITDA de 3,31 veces –dentro del rango de 4 veces marcado por la compañía como objetivo– a pesar del elevado ritmo inversor», ha añadido la compañía.
De cara a 2024, Acciona ha anticipado un «crecimiento a un dígito sin plusvalías» del Ebitda y de «doble dígito incluyendo plusvalías». A medio plazo, anticipa crecimiento a «doble dígito (con y sin plusvalías)».
También ha anticipado un ‘cash flow neto de la inversión’ que se situará entre 2.000 y 2.500 millones de euros, y el pago de un dividendo de 4,85 euros por acción en 2024, lo que supone un 8% más que en 2023. El objetivo es un «crecimiento anual estable a un dígito» del dividendo a «medio plazo». Además, la compañía ha anunciado un programa de recompra de acciones valorado en 70 millones de euros.