La AIE ha reducido la demanda esperada para 2025 en 300.000 barriles diarios hasta 730.000 barriles diarios, según el informe recogido por Bloomberg. En el caso de 2026, el crecimiento del consumo será aún más lento, con 690.000 barriles diarios, debido a «un entorno macroeconómico frágil» (la guerra comercial) y a la creciente popularidad de los vehículos eléctricos.
Las principales firmas de análisis y organismos energéticos contemplan una caída del consumo de petróleo y cada vez más voces contemplan la posibilidad de que el sector del crudo llegue a su máximo punto a finales de esta década. El informe llega un día después de que la OPEP estableciera un descenso del 1% del consumo mundial anual hasta 2026, con varios países pertenecientes al cártel sublevados y aumentando la producción independientemente de los designios de Arabia Saudí y Rusia.
El precio del barril de Brent, la referencia en Europa, permanece en estos momentos por debajo de los 65 dólares, considerado el nivel mínimo por parte de la AIE para mantener las explotaciones de esquito.
Las caídas vuelven a reinar en el petróleo. Sin ser las más reseñables de los últimos días, donde se han visto auténticos desprendimientos en los precios, el precio de referencia europeo, el Brent, se deja cerca de medio punto. Este descenso permite que pierda los 65 dólares el barril. Desde Renta 4 advierten de que esta ‘batalla técnica’ que se ha perdido supone un punto de inflexión clave. Eduardo Faus, analista técnico de la firma, explica que «han perdido los importantes soportes técnicos que representan su punto más bajo en los últimos tres años».
Concretamente se refiere a los ya mencionados 65 euros para el brent, pero también los 68 del WTI (el barril texanos). Ambos actuaban con un suelo cuya ruptura abre la puerta a un gran descenso. El experto prosigue alegando que «la pérdida se produce tras un choque contra la zona de paso de la directriz bajista desde los máximos de 2022. Las implicaciones son negativas para las acciones petroleras, como podemos ver en el gráfico comparativo, cuyo sectorial ha perdido el rango lateral que formaba en los últimos doce meses».