El movimiento, cuyo precio no ha trascendido, queda sujeto a la aprobación de las autoridades de competencia, tiene como objetivo consolidar la posición de Bergé en las instalaciones y operaciones portuarias en España, Portugal y Latinoamérica.
El movimiento supone que el grupo industrial vasco, pase a manos de la gestora propietaria de la naviera Maersk. Originariamente dedicados a la estiba y consignación de buques, Bergé ha ido expandiendo su actividad y ahora cuenta con presencia en 19 países y más de 4.000 empleados.
El acuerdo establece la capitalización de la empresa para impulsar su crecimiento y expansión en los próximos años. Ambas partes han manifestado su intención de realizar nuevas inversiones para fortalecer su presencia en el mercado portuario y logístico en las regiones donde opera. La asociación permitirá a Bergé «acelerar sus planes de crecimiento orgánico e inorgánico». A.P. Moller Capital, que ya ha desarrollado inversiones en infraestructura logística, considera que esta operación permitirá reforzar la posición de Bergé en el mercado y ampliar su actividad en sectores estratégicos.