La medida, anunciada en una comunicación del Banco de Argelia dirigida a las entidades bancarias del país, supone levantar las restricciones que aún pesaban en la mayoría de los sectores tras ir introduciendo excepciones en la importación de carne o cemento.
En la circular, el Banco de Argelia insta a los directores generales de las entidades bancarias del país a proceder con normalidad en las transacciones con España. «Los bancos intermediarios autorizados deben tener en cuenta que las operaciones de domiciliación bancaria de comercio exterior con origen o destino en España deben tramitarse de acuerdo con la normativa vigente en materia de divisas», declara la nota.
En junio de 2022, en una nota enviada a todas las entidades bancarias del país árabe, la Asociación de Bancos y Entidades Financieras de Argelia (Abef) anunció «la congelación de las domiciliaciones bancarias de las operaciones de comercio exterior de productos y servicios con origen y destino en España a partir de mañana jueves 9 de junio». La asociación exige en la misiva que se adopten todas las disposiciones necesarias para «una aplicación estricta de esta medida». El país impuso el bloqueo en represalia por el histórico cambio de posición del Gobierno español en el contencioso del Sáhara Occidental tras alinearse en marzo de 2022 con las tesis marroquíes para la ex colonia española.
El veto se levantó parcialmente el pasado enero para las exportaciones españolas, concretamente en lo referido a transacciones comerciales de productos avícolas españoles. En julio trascendieron las declaraciones del ministro de Comercio y Promoción de las Exportaciones argelino, Tayeb Zitouni, avanzando el envío a España de 150.000 toneladas de hierro a cargo de Tosyali, filial argelina de una compañía turca que produce acero e hierro y que tiene su central de producción en los alrededores de la ciudad argelina de Orán.
Fuentes empresariales atribuyen este desbloqueo a la crisis desatada ahora con Francia después de que Enmanuel Macron reconociera la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental. La circular dictada este miércoles, agregan estas fuentes, se limita a ordenar a los directores generales de los bancos argelinos la obligación de «domiciliar operaciones desde y hacia España teniendo en cuenta la reglamentación en vigor». «Es decir desbloquear», apuntan a este diario.
En el último año se han sucedido los gestos. El incremento del número de vuelos entre los dos países, autorizado por el Ministerio argelino de Transportes, se sumó al nombramiento el pasado noviembre de un nuevo embajador ante España, que Argelia había retirado con la crisis.
Hasta ahora, sin embargo, muchas de las empresas españolas con negocios en Argelia seguían sufriendo los impagos derivados del cierre y otras, para sortear el veto, habían optado por hacer pasar sus mercancías por países vecinos como Portugal o Italia.
Las pérdidas acumuladas por las empresas españolas superan los 3.800 millones de euros anuales desde la crisis política. El cierre ha sido total y drástico: las compañías españolas han denunciado la devolución de todos los contenedores con un puerto español como origen. Una situación ante la que el Gobierno español, que no ha podido rebajar el nivel de las crisis diplomática, recurrió a Bruselas. En junio la Comisión Europea dio luz verde para buscar «una solución mutuamente satisfactoria» a las dificultades que experimentan varios países de la UE, entre ellas, las importaciones y exportaciones de bienes y los movimientos de capital con España.