A pesar del descenso respecto al mes pasado, ambos indicadores se mantienen cómodamente dentro de la zona de expansión (por encima de 50). En octubre, el índice de producción industrial avanzó un 1,9% interanual en octubre (0,8 p. p. más que en septiembre), una mejora sustancial respecto al promedio del 3T (0,6%). El avance por tipo de bienes fue generalizado, destacando los bienes de equipo, que avanzaron con fuerza (+2,0% interanual), tras un 3T en negativo (–2,5%).
Las llegadas de turistas internacionales aumentaron un 9,5% interanual en octubre (+9,1% interanual en septiembre), mientras que el gasto turístico internacional aumentó un 15,5% interanual (12,7% interanual en septiembre). Destaca en positivo el turismo alemán (+14,0% interanual en llegadas, +23,5% interanual en gasto), en tanto que el turismo británico sigue creciendo de manera más modesta (+4,8% llegadas, +10,0% gasto). La tasa de crecimiento interanual del turismo extranjero en octubre fue 2,3 p. p. superior a la de julio y agosto, continuando la tendencia hacia crecimientos más fuertes fuera de temporada.
El empleo se moderó ligeramente en noviembre y la afiliación a la Seguridad Social cayó en noviembre en 30.051 personas, un 0,14% intermensual, un descenso habitual por la caída del empleo en la hostelería, pero que este año supera ligeramente la cifra del año pasado (–0,06%) y la del promedio de dicho mes en 2014-2019 (–0,12%). En términos desestacionalizados, el empleo anota una subida mensual de 13.116 afiliados, el menor avance desde julio; en todo caso, el aumento de la afiliación en lo que va de 4T se acelera hasta el 0,5% trimestral desde el 0,3% del 3T. En cuanto a la afiliación en la provincia de Valencia, no se aprecia un impacto significativo derivado de la DANA: los afiliados crecieron en noviembre en 11.217, algo por debajo del año pasado (+17.235) y de la media del periodo 2014-2019 (+19.069), mientras que la tasa interanual se moderó desde el 2,7% al 2,2%, fruto de una caída del empleo en hostelería del 2,5% intermensual, muy superior a la habitual en dicho mes (–0,9% en 2014-2019) (véase la Nota Breve).
Los datos de ejecución hasta el 3T muestran un déficit público en España ligeramente menor que en los nueve primeros meses de 2023. El déficit consolidado de las Administraciones públicas, excluidas las corporaciones locales, en el acumulado de enero a septiembre de 2024, fue del 1,6% del PIB, frente al 1,7% del mismo periodo de 2023. Este resultado refleja el dinamismo de los ingresos tributarios (+7,5% interanual en el acumulado hasta septiembre) y de las cotizaciones sociales (+7,4% interanual), gracias a la evolución positiva del mercado de trabajo, de los salarios públicos y de las pensiones. Con todo, el crecimiento del gasto público fue de un notable 6,5% interanual en los primeros nueve meses de 2024, debido al aumento del gasto en transferencias sociales y remuneraciones de los empleados públicos. La evolución de los ingresos y los gastos apuntan a que el déficit público podría ser en 2024, excluidos los gastos por la DANA, algo menor que en 2023 (que al cierre del ejercicio se situó en el 3,5% del PIB) (véase la Nota Breve).
Por otra parte, la nueva concesión de crédito a hogares (sin renegociaciones) creció un 25% interanual en octubre (19% interanual en septiembre). El nuevo crédito de vivienda y con finalidad de consumo continuaron erigiéndose en motores de este dinamismo con ritmos de avance del 25,3% interanual y el 28,7% interanual, respectivamente. En el acumulado del año, el nuevo crédito de vivienda avanza un 17,2% interanual y consumo un 19,3% interanual. En empresas, el nuevo crédito (sin renegociaciones) creció un 12,5% interanual en octubre (7,3% interanual en septiembre).
El precio de la vivienda volvió a crecer con fuerza en el 3T 2024, con un aumento del 2,8% intertrimestral, según el INE. En términos interanuales, el precio se aceleró 3 décimas respecto al trimestre anterior (8,1% en el 3T 2024 frente al 7,8% del 2T). Tanto el precio de la vivienda de obra nueva como el de segunda mano crecieron con fuerza (2,8% intertrimestral en ambos casos), pero en términos interanuales la vivienda nueva es la que más crece (9,8% frente al 7,9% de la segunda mano). La fortaleza de la demanda y la escasez de oferta, junto con el descenso de los tipos de interés, hacen prever que la tendencia alcista del precio de la vivienda tendrá continuidad en los próximos trimestres.
En la reunión del próximo 12 de diciembre, se espera que el BCE baje los tipos en 25 p. b. y deje depo en el 3,00% (100 p. b. por debajo del pico alcanzado en septiembre de 2023, y tras cuatro recortes de tipos desde junio). Los 25 p. b. de recorte recogen el consenso que hay en el BCE para una distensión gradual de la política monetaria y, a la vez, equilibran dos visiones complementarias del escenario: la cautela de algunos miembros del Banco Central para no dar todavía por finalizada la lucha contra la inflación, con la preocupación de otros por el riesgo de mantener una política restrictiva en un contexto de enfriamiento de la actividad económica. Las últimas cifras de inflación son inferiores a lo previsto por el BCE y algunos de los indicadores incluso reflejan tasas alrededor del 2%. Sin embargo, a una parte de esta desinflación se le acaba el recorrido, al recoger la normalización pasada de factores de oferta (por ejemplo, la inflación negativa en energía y más baja de lo habitual en bienes), mientras que los servicios siguen en tasas altas (con previsión y señales de enfriarse, pero con la cautela que aconseja un mercado laboral sólido). En actividad, las señales de enfriamiento son más evidentes en indicadores soft y de confianza (por ejemplo, los PMI han caído sostenidamente a zona contractiva), que en los datos de mayor calidad, pero de publicación más rezagada (por ejemplo, el PIB aceleró de un 0,1% trimestral en el 4T 2023 a un 0,4% trimestral en el 3T 2024; aunque la volatilidad de Irlanda y los juegos olímpicos de París dificultan la lectura del último dato). Todo ello, sumado a un mapa de riesgos exigentes, hace que un recorte de 25 p. b. en diciembre y un mensaje que transmita la intención de seguir bajando los tipos de interés en reuniones futuras, permitan acompasar mejor la distensión de la política monetaria a la velocidad con la que se esclarecen las incertidumbres del escenario y de los propios datos (véase la Nota Breve).
En cuanto a los tipos de interés, relativa estabilidad en la deuda soberana en esta semana corta, con movimientos leves y mixtos a ambos lados del Atlántico. En la eurozona, el colapso del Gobierno francés tras no conseguir aprobar unos presupuestos con recortes de gastos ha supuesto una ligera ampliación de la prima francesa, en un contexto de estabilidad de otros diferenciales periféricos como España o Portugal, e incluso caídas de la prima italiana. A la incertidumbre política se suma la debilidad económica de los países del núcleo de la eurozona, con los PMI compuestos de Francia y Alemania para noviembre ligeramente peores de lo esperado y ambos en zona contractiva. En este contexto, los implícitos del mercado monetario siguen descontado una bajada de 25 p. b. en su próxima reunión de diciembre (y unos 150 p. b. de bajadas adicionales hasta junio) y el euríbor 12 meses cede 11 p. b. en lo que llevamos de semana. En EE. UU. los datos de empleo conocidos en la semana, tanto de nuevas vacantes en octubre como de la encuesta ADP para noviembre, arrojaron resultados en general positivos, aunque mixtos, a la espera de que el viernes se conozcan los datos de empleo. Por otro lado, el PMI compuesto fue ligeramente inferior a lo esperado, aunque en zona claramente expansiva. En este contexto, el mercado sigue esperando una bajada de 25 p. b. de la Fed en su reunión del 18 de diciembre, aunque Powell ha señalado en sus últimas declaraciones que la economía se encuentra mejor de lo que se esperaba en septiembre cuando comenzaron su ciclo de bajadas y que la Fed puede permitirse ser algo más cauta. En cuanto a la renta variable, ganancias generalizadas en los índices de los mercados desarrollados. Los índices europeos rebotan tras un mal mes de noviembre, con algunos operadores de mercado señalando que la caída del Gobierno francés podría suponer unos menores impuestos en los próximos trimestres, y alentados por algunos datos que apuntan a una ligera mejoría del ciclo en China. En cuanto al mercado de divisas, leve apreciación del euro frente al dólar y también destaca la apreciación del yen, donde unos datos de inflación algo mayores a lo esperado han hecho repuntar las expectativas de subidas de tipos del Banco de Japón. Por último, en el mercado de materias primas, caídas de los precios de gas natural en Europa, a medida que aumenta el suministro de gas natural licuado por mar para amortiguar el impacto de un tiempo más frío de lo habitual.