Según los datos presentados por la patronal Sernauto, la industria española de componentes de vehículos alcanzó, en su conjunto, una facturación de 41.529 millones de euros, lo que supone un avance del 10% con respecto al volumen registrado en el ejercicio anterior (37.668 millones), y una mejora del 13% frente a los niveles preCovid (35.822 millones).
Según la asociación la principal razón de esta mejora descansa en la inflación, dado que el volumen de producción «se mantuvo bajo». Ya que, la producción de vehículos avanzó un 10% interanual en 2023, pero sigue un 13% por debajo del nivel de producción que presumía antes de la irrupción de la pandemia, según datos de Anfac.
Seis de cada diez euros que facturó la industria de componentes en España en el último año procedieron de las exportaciones acometidas a más de 170 países, que alcanzaron los 25.140 millones de euros, un 11% más que en 2022. De la facturación acumulada en España (16.389 millones), la cadena de suministro generó para el sector 10.094 millones (un 10,8% más) y los recambios, 6.295 millones en 2023, un 6,9% más.
El progreso de la recuperación de la industria es más lento en el empleo. Los datos proporcionados por Sernauto revelan una ligera mejora del 0,8% en el empleo directo con respecto al año anterior, hasta las 204.650 personas. Un dato, que sigue lejos del registrado en 2019, cuando el volumen de empleo generado de forma directa alcanzaba las 225.400 personas.
Las previsiones que ha ofrecido Sernauto para este año dibujan un ejercicio «estable», en el que esperan un aumento cercano al 3% en la facturación y un ligero alza del 1% en el nivel de empleo, que se verá potenciado por la necesidad de seguir incorporando perfiles cada vez más digitales y tecnológicos. No obstante, desde la asociación aclaran que las previsiones están sujetas a la evolución de la producción de vehículos, el mercado y la situación geopolítica y económica a nivel mundial.