Esa cantidad permanece estable respecto a la del año anterior y es incluso algo inferior a los 1.294 euros que de media se pagaron en 2022, cuando el parque móvil era algo más reducido, 30,2 millones de vehículos. La lista de vías de recaudación asociadas al coche o a cualquier tipo de vehículo es larga. Sin duda, los asociados al consumo de combustible son una parte muy relevante, pero no la única. Sólo el año pasado el total de la recaudación de las haciendas alcanzó los 39.838 millones de euros. Supone un incremento del 15% en apenas cuatro años.
En España el parque móvil no para de aumentar. Lo hace mientras la edad media de los vehículos sigue aumentando. Los hogares con dos vehículos también van en aumento. Una realidad que no hace sino incrementar ese ya elevado pago en forma de tasas e impuestos que conlleva tener un vehículo. La compra de un coche nuevo es el primer capítulo de pago tributario que se debe afrontar, tanto en forma de pago de IVA como de impuesto de matriculación. Sólo en 2024 la adquisición de nuevos vehículos generó al Estado la recaudación por un total de algo más de 6.000 millones de euros, un 42% más que en 2021.
Según los datos de Anfac, el consumo de carburante representa más de la mitad de los ingresos que genera el parque móvil. Y no ha dejado de aumentar. Hoy hay en España 1,7 millones de vehículos más que hace sólo cinco años. Más coches, camiones y autobuses que requieren de combustible y recargas para funcionar y que con ello generaron, pagaron en impuestos nada menos que 22.709 millones de euros en concepto de Impuestos Especiales e IVA. La larga lista de tributos que conlleva tener un vehículo no parece ser freno para adquirir uno. En nuestro país el número de turismos por cada 1.000 habitantes no ha dejado de aumentar. Y lo ha hecho a un ritmo elevado. En 2011 la cifra era de 478 turismos por cada 1.000 habitantes en España. Hoy, en cambio, esa tasa ha alcanzado los 544 turismos, es decir, más de un vehículo por cada dos personas.
Coches, camiones y autocares por los que se debe abonar, además de todo lo anterior, impuestos de circulación -3.031 millones recaudados- y, en su caso, un impuesto por transferencia de vehículos usados -737.000 euros-. Un parque envejecido y de gran consum. En esta contabilidad impositiva también se incluye lo que suponene de ingresos para el Estado lo que se paga tras realizar una reparación, un mantenimiento o un recambio de pieza o componente. Sólo por esta vía el ingreso es de algo más de 5.600 millones de euros. Los seguros o los permisos de circulación también esconden impuestos que engordan la recaudación de la Administración.
