La operación refuerza la presencia del grupo turístico en un segmento con gran potencial de desarrollo y escasa presencia de grandes marcas.
Fundada en 1996, Rusticae es un club de alojamientos singulares con 210 establecimientos: 186 en España, 18 en Portugal, 4 en Marruecos (Marrakech), y otros dos en Andorra e Italia. De ellos, 65 son casas de alquiler completo o apartamentos, y el resto, hoteles boutique. Su oferta se centra en turismo rural de alta gama, atención personalizada y experiencias únicas, con un reconocido posicionamiento en el mercado español.
Con la compra, Barceló se convierte en accionista mayoritario, mientras que Sara Sánchez, actual consejera delegada, retiene el 20% del capital y seguirá al frente de la empresa. Las fundadoras, Carlota Mateos e Isabel Llorens, ponen fin a su etapa al frente de la compañía.
Rusticae nació de la experiencia de Isabel Llorens y Carlota Mateos al gestionar, en 1996, un pequeño hotel con encanto en Asturias. Detectaron la falta de una marca que representase a pequeños alojamientos singulares en España y decidieron crear un club que aportara visibilidad y sinergias al sector. El proyecto creció hasta integrar hoteles, apartamentos y casas rurales con criterios de selección basados en la ubicación, la decoración, el cuidado por el detalle y la filosofía del servicio.
En sus casi 30 años de trayectoria, Rusticae ha combinado la presencia online y el uso de nuevas tecnologías con un concepto de calidad exigente y una estrategia que ha permitido ampliar su red a nivel internacional. La empresa cuenta con divisiones de hoteles y distribución, comunicación y marketing, llaves regalo y atención al cliente, y ha desarrollado proyectos orientados a la internacionalización y a la gestión centralizada de datos para sus alojamientos asociados.