Sin embargo, algunos expertos dudan de la intensidad de estos recortes después de que los últimos indicadores de EEUU hayan mostrado la resistencia de la inflación. Veit, gestor de cartera del gigante de la gestoría de activos PIMCO, coincide con las previsiones de recortes de tipos en Europa a partir de junio, pero señala que estas medidas se implantarán «con cautela». En concreto, Veit avanza que es probable que el supervisor realizara las rebajas «en los pasos convencionales de 25 puntos básicos».
El experto ha publicado un comentario sobre al última reunión de la institución, en el que señala que «los riesgos apuntan probablemente a un menor número de recortes», por razones que incluyen la rigidez de la inflación de los servicios o la resistencia del mercado laboral. Cita también «la relajación de las condiciones financieras y las consideraciones de gestión de riesgos del BCE» para explicar las caídas más comedidas.
El BCE decidió el pasado jueves mantener los tipos de interés por quinta vez consecutiva en el 4,5%, aunque ya habló de eventuales recortes de estos, si los indicadores se mantienen en la senda prevista. La decisión del organismo europeo se produjo un día después de que la inflación en EEUU volviera a repuntar en marzo hasta situarse en el 3,5%, lo que según los expertos complica y puede retrasar la decisión de posibles recortes de tasas de la Reserva Federal (Fed). «Esperábamos que la Fed comenzara a relajar su postura restrictiva en junio desde octubre pasado, pero ahora retrasamos nuestra expectativa del primer recorte a julio», apuntaba David Page, jefe de investigación macroeconómica de Axa Investment Managers tras conocerse el dato de los precios estadounidenses.
Batten, gestor de fondos de Renta Fija de Columbia Threadneedle Investments también estima que las recientes sorpresas al alza de la inflación en EEUU han puesto en duda que la Fed vaya a iniciar un ciclo de relajación este año. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, marcó las distancias con la Fed en la rueda de prensa posterior a la decisión del BCE y destacó que las decisiones del organismo dependerán de los datos y no de los pasos de la Fed.
Los analistas mantienen la confianza en que el BCE inicie los recortes de tipos en junio, aunque se muestran más cautos sobre los siguientes pasos. En este sentido, los expertos de Bank of America esperan que el BCE inicie los recortes en junio, pero dudan sobre cuáles serán los siguientes recortes tras éste debido a los riesgos que existen en el mercado a largo plazo.
«La decisión de junio se refiere a un recorte en junio, no más que eso, al menos por ahora y hasta que la inflación de los servicios haya bajado mucho. No dependen de la Fed, pero EEUU (y China, y Japón) tiene un impacto indirecto. El petróleo creará ruido, pero mientras lleguemos a 2025, podrán tolerar los baches», apunta Segura-Cayuela, economista jefe para Europa de Bank of America. Por su parte, Rhouma, la economista europea del equipo de renta fija de AllianceBernstein, considera que en la situación actual, los riesgos se inclinan hacia menos recortes en 2024. «Mi hipótesis de base para cuatro recortes este año, con un total de 100 puntos básicos de relajación, se mantiene sin cambios, pero vale la pena destacar los riesgos en torno a ella. Los datos de inflación de marzo para la eurozona confirmaron la tendencia desinflacionista, pero al mismo tiempo mostraron la persistencia de la inflación de los servicios», añade.
Algunos expertos consideran que aunque el primer paso del BCE irá por delante del organismo estadounidense, el resto del camino sí que irá acompasado. Max Stainton, estratega senior de macro global de Fidelity International, cree que aunque la intención del supervisor de iniciar el ciclo de recortes en junio ya está fijada, considera que el camino más allá de este punto de partida seguirá dependiendo de la senda de la Reserva Federal.