Bruselas dibuja un horizonte: 2040, y apunta de que el alza del gasto en pensiones se elevará en 2,5 puntos porcentuales del PIB para convertirse, en 2070, en el segundo país de la UE con el mayor gasto en pensiones.
Concretamente, el gasto en pensiones se situará este año en el 13% del PIB en el 2024, 217.00 millones de euros, según la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal. Una cifra que Bruselas espera que se incremente a casi 261.000 millones de euros a final de la próxima década. Alcanzará su nivel más alto en 2050, cuando se incrementará 3,5 puntos porcentuales respecto a los niveles de gasto de 2024. «En 2070, España sería el país con el segundo mayor gasto bruto en pensiones de la UE», asevera Bruselas.
Por otro lado, el informe apunta que el gasto total relacionado con la edad en España aumente de aproximadamente el 24,5% del PIB en 2024 a alrededor del 27,5% en 2040 y el 29% en 2070 y al 29% en 2070). «Este aumento se debe al incremento previsto del gasto en pensiones y, en menor medida, del gasto en asistencia sanitaria y cuidados de larga duración», argumenta la Comisión Europea.
En todo caso, «la reforma de las pensiones va en la buena dirección», decían fuentes comunitarias durante la presentación del paquete económico de Primavera de la Comisión Europea. «Está, efectivamente, contribuyendo a retrasar la edad de jubilación» por lo que las perspectivas presentadas en el informe podrían experimentar una mejora.
El Ejecutivo comunitario advertía en su análisis que el principal riesgo para la sostenibilidad fiscal en España lo representa el envejecimiento de la población y, en parte, las desfavorables condiciones fiscales previas, con altos niveles de déficit y deuda. «La aplicación coherente de la ‘cláusula de cierre’ introducida en la reforma de las pensiones de 2023 debería contribuir a mitigar la brecha de la sostenibilidad fiscal vinculada al gasto público en pensiones», apunta el Ejecutivo comunitario. Se fija, además, en las recomendaciones de la Airef, para instar a realizar reformas e inversiones en el marco del Plan de Recuperación que mejoren la eficiencia del sistema sanitario.
La Comisión Europea apunta que fomentar los regímenes de pensiones complementarias contribuiría a la sostenibilidad y adecuación de las pensiones, a la inversión en capital; el acceso a la financiación; el crecimiento; y la innovación