Así pues, los dos primeros accionistas del banco recibirán un total de 850 millones de euros del dividendo que se abonará el miércoles, que se aprobó en la última Junta General de Accionistas del banco.
El Estado percibirá esos 300 millones porque el FROB tiene el 17,3% del capital, mientras que a la Fundación Bancaria La Caixa le corresponde esa cantidad dado que es el primer accionista del banco a través de Criteria, con un 32,24 % del capital.
La Fundación Bancaria La Caixa financia su obra social con los dividendos de Criteria, la compañía que gestiona el patrimonio empresarial de la fundación. El año pasado esta fundación destinó 508 millones de euros a su obra social, mientras que en 2023 ha elevado su presupuesto hasta los 538 millones, el mayor de su historia. En total, la Fundación La Caixa ha obtenido unos dividendos de 1.550 millones de euros de CaixaBank en los últimos cinco años.
Además de los 550 millones de euros que recibirá el miércoles, la fundación ha recibido del banco 354 millones en 2022; 65 millones en 2021; 167 millones en 2020 y 407 millones en 2019.
Por su parte, al FROB le han correspondido unos 1.000 millones en estos cinco años, repartidos en 300 millones en este ejercicio; 190 millones en 2022; 35 millones en 2021; 220 millones en 2020 y 219 millones en 2019, si bien en estos dos últimos ejercicios el Estado percibió esos fondos como accionista de Bankia, antes de que se produjera la fusión con CaixaBank.
El dividendo de 0,2306 euros es con cargo a los resultados de 2022 y supone un aumento de un 58% respecto al ejercicio anterior.
Este dividendo implica que el banco destinará el 55% de las ganancias obtenidas en 2022 a este fin, mientras que de cara al ejercicio de 2023, el consejo de administración del banco ya dijo en febrero que distribuiría en efectivo entre el 50 y el 60% del beneficio neto consolidado, que se abonará en un único pago en abril de 2024.