En Castilla y León, donde el fuego, además de arrasar miles de hectáreas de alto valor natural y agrícola, ha destruido infraestructuras rurales, la entidad ha activado una línea de ayudas específica por valor de 30 millones de euros.
Las ayudas se destinarán, por un lado, a anticipar el cobro de las indemnizaciones de las compañías aseguradoras en pérdidas materiales como vehículos o inmuebles, de forma que se facilita el rápido acceso de las compensaciones a las familias y negocios que puedan verse afectados.
La segunda línea de apoyo que ha puesto en marcha la entidad se canalizará a través de AgroBank, la división de negocio de CaixaBank dirigida al sector agroalimentario, y está destinada a las inversiones que las explotaciones agrarias o ganaderas puedan precisar para la adecuación necesaria para continuar su actividad.
Asimismo, las ayudas que ha activado CaixaBank también estarán disponibles para clientes que lo soliciten de otras zonas que se han visto afectadas por los incendios forestales de los últimos días, como la Comunidad de Madrid y Galicia.