En su estudio correspondiente al mes de abril, el banco analiza esta variable clave, que estima cuánto puede crecer la economía de manera sostenida en ausencia de ‘shocks’ si se utiliza toda la capacidad productiva y no se generan desequilibrios. Con este indicador CaixaBank Research arroja sus perspectivas sobre el crecimiento tendencial de la economía española.
Ante las expectativas de moderación en el crecimiento del PIB potencial en el medio plazo, desde la entidad han llamado a introducir reformas estructurales para potenciar la inversión, mejorar la eficiencia del mercado laboral e impulsar el incremento de la productividad.
Existen varias maneras de estimar el PIB potencial. En este análisis, CaixaBank Research ha optado por la óptica de la función de producción. Según esta metodología, el PIB se puede modelizar como una función de un conjunto de factores de producción, típicamente el trabajo, el capital y la llamada productividad total de los factores (PTF).
Con todo, la previsión a medio plazo supone un retorno rápido del crecimiento de la productividad total de los factores hacia su promedio histórico del 0,7% anual a lo largo del horizonte de proyección. Los expertos observan una disminución progresiva de la contribución del trabajo, debido a los factores demográficos, que se compensa parcialmente con una mejora de la aportación del capital.
Después del bajo nivel de inversión que se ha producido entre 2021 y 2023, la entidad espera una cierta recuperación en los próximos años, lo que debería impulsar la contribución del factor capital al crecimiento.
CaixBank Research señala que su previsión de crecimiento del PIB potencial a medio plazo del 1,3% es similar a la que ofrecen otras instituciones. Por ejemplo, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) estima un crecimiento potencial del 1,3% a medio plazo (a partir de 2028). El Banco de España , por otra parte, estima un crecimiento potencial del 1,1% en 2030 en ausencia de los fondos ‘Next Generation EU’, pero, si se tienen en cuenta los recursos europeos, aumenta la previsión hasta una horquilla entre el 1,3% y el 1,9%, en función de los supuestos acerca del impacto de los fondos.
No obstante, desde CaixaBank Research han reconocido que la incertidumbre que rodea las previsiones de crecimiento del PIB potencial es alta debido a diversos factores, que van desde cuestiones técnicas en la medición y especificación del modelo, hasta los supuestos que subyacen las previsiones.
De hecho, si la tasa de paro estructural sigue reduciéndose más allá de 2025, a una tasa de tres décimas cada año, este cambio llevaría la tasa de paro estructural algo por debajo del 10% en 2030 y aumentaría el crecimiento potencial de la economía en dos décimas hasta el 1,5% en 2030. Si la inversión crece un punto más al año hasta 2030, el crecimiento potencial del PIB aumentaría de manera gradual y en 2030 se situaría en el 1,5%. Este incremento podría ser superior si, además, se tuviera en cuenta el efecto que ello podría tener sobre el crecimiento de la productividad de la economía.