«Nuestra candidatura es fuerte, contamos con apoyos muy fuertes y, por supuesto, el apoyo de los Estados miembros no tiene absolutamente nada que ver con las negociaciones bajo la presidencia española», ha recalcado la vicepresidenta primera en rueda de prensa tras la reunión informal ministerial de Telecomunicaciones que se ha celebrado en León. En particular, Calviño ha recalcado que el proceso para presidir el BEI no tiene «nada que ver» con el trabajo que se está desarrollando para lograr cerrar el acuerdo sobre las nuevas reglas fiscales.
En este sentido, ha recordado que desde el Gobierno de España están trabajando constantemente a todos los niveles con el conjunto de los Estados miembros para tratar de preparar un primer texto normativo que llevarían al la próxima reunión de ministros de Economía y Finanzas (Ecofin) de la Unión Europea del próximo 9 de noviembre. «Es evidente que este trabajo y el liderazgo de la presidencia española no tiene absolutamente nada que ver con el otro proceso. Son dos temas que están totalmente separados», ha enfatizado.
El proceso sobre la decisión para elegir al próximo presidente del BEI le corresponde al presidente del consejo de Gobernadores del Banco, que recae en este momento en el ministro de finanzas belga, Vincent Van Peteghem. Calviño se disputa ser la sucesora de Werner Hoyer al frente del BEI con la hasta ahora vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea responsable de Competencia, la liberal danesa Margrethe Vestager. Junto a ellas se mantienen en la carrera la polaca Teresa Czerwinska, el italiano Daniele Franco y el sueco Thomas Östros. El candidato ganador deberá reunir el apoyo del 68% del capital del banco y de al menos 18 Estados miembro. La participación de cada Estado miembro se reparte en función de su peso económico en la UE expresado en el PIB en su entrada en la Unión -España contribuye con el 9,66%- lo que hace que resulte indispensable el apoyo de las principales potencias económicas de la UE.Aunque recientemente el ministro de Finanzas alemán, Lindner, ha asegurado haber tomado ya una decisión, ha evitado hacer público el candidato al que respaldará, a pesar de que tanto él como su homólogo francés, Bruno Le Maire, alabaron en la reunión de Santiago de Compostela el perfil de Calviño, pero sin comprometer apoyos.
España avanza con fuerza
A la espera de que este viernes se conozcan los datos del Producto Interior Bruto del tercer trimestre de este año, Calviño ha destacado que España sigue avanzando con fuerza y está mostrando una notable fortaleza y resiliencia en un contexto internacional «muy complejo». Según Calviño, durante el curso de 2023 la economía española sigue manteniéndose fuerte, gracias al mercado de trabajo, la inversión y el sector exterior. Esto hace prever al Ejecutivo en funciones que este año el crecimiento del PIB será del 2,4% y del 2% en 2024, una cifra que está «muy por encima de las grandes economías europeas y de la media de la zona euro».