En lo que respecta al mercado de Iberia (España, Portugal y Andorra), la principal embotelladora de Coca-Cola, que embotella y comercializa también bebidas como Sprite, Fanta o Monster, cerró los primeros nueve meses del año con unos ingresos de 2.620 millones de euros, repitiendo la cifra del año anterior. Solo en el tercer trimestre, se situaron en 1.065 millones, un 1,3% más. Según la compañía, el volumen del tercer trimestre se mantuvo «prácticamente estable», con un ligero crecimiento en Portugal que compensó la «leve caída» registrada en España.
La compañía está inmersa en el desarrollo de nuevos lanzamientos como Fuze Tea, la marca con la que Coca-Cola compite en té listo para beber tras su ruptura con Nestlé (Nestea). Coca-Cola EP señala que la transición de Nestea «avanza mejor de lo previsto».
Por su parte, Monster y las bebidas deportivas, impulsadas por Aquarius, «continúan mostrando un fuerte crecimiento», a la espera del desempeño de la nueva bebida Bodyarmor, que se lanzó en España a finales de septiembre. En el total de Europa, los ingresos se situaron en 11.665 millones de euros en nueve meses, un 3% más, mientras que en Asia Pacífico se elevaron un 2,1%, hasta los 4.019 millones.
Para el CEO de Coca-Cola EP, Gammell, 2025 sigue siendo «un año sólido» para la empresa, «reflejo de la fortaleza de nuestras grandes marcas, el compromiso de nuestro equipo, una ejecución sobresaliente y las sólidas relaciones con nuestros socios de marca y clientes».
En su presentación de resultados hasta septiembre, la compañía ha anunciado el reparto de un dividendo correspondiente al segundo semestre por importe de 1,25 euros por acción, que se abonará el próximo 3 de diciembre de 2025 a los accionistas con derecho a percibirlo registrados a fecha de 14 de noviembre de 2025. Este anuncio eleva el dividendo total del ejercicio a 2,04 euros por acción y mantiene una tasa de reparto anualizada cercana al 50%.
