Pues bien, hoy, probablemente, le damos la razón porque España se parece mas a un pollo sin cabeza que a un país occidental serio y democrático en el que la división de poderes es un hecho y en el que los políticos piensan en Estado y no en como destruir la nación empleando en ello todo su tiempo y esfuerzo.
Y lo pero de todo ello es que los acuerdos y compromisos se unos y otros se ocultan a los votantes como si fuésemos tontos y no nos enterásemos de lo que está pasando y de cómo se vende todo, hasta lo invendible con tal de mantener las poltronas del poder y los recursos que el proporciona para caprichos. Es el caso de los acuerdos entre EH Bildu y Psoe, entre Otegui y Sánchez para entregar Pamplona y Navarra a los filoetarras para que estos logren alcanzar su sueño de un país vasco inexistente formado por las tres provincias vascas y Navarra.
O la nueva y definitiva humillación de un Sánchez sumiso a Puigdemont que ha admitido reunirse con el delincuente según ha informado el propio Junt ´s por boca de su secretario Jordi Turull al dar cuenta de que ambos, mantendrán una reunión en una fecha y lugar por determinar, aunque la condición de prófugo de la justicia del independentista hará que el encuentro deba de producirse en el extranjero.
El objetivo, según ha explicado, es «normalizar unas relaciones entre los dos presidentes». «Nos hemos emplazado a encontrar la fecha y el lugar para que se vean. Lo importante es que se encuentren y hablen, en un encuentro como debe ser, sin fotografías ni logos de partido», Para Turull, se trata «de normalizar una relación y una negociación entre dos presidentes que, desde 2017, fruto de la represión, no ha sido posible».
Eso si los socialistas no paran de desmentirlo, pero ya sabemos que es lo que sucede con este tipo de desmentidos, que tarde o temprano la realidad es muy tozuda y hasta ahora los que no han mentido han sido los separatistas, no así Sánchez y sus esbirros que no paran de mentir una y otra vez como si les fuese la vida en ello.