En su último informe remitido a los inversores con motivo de la celebración de la junta de accionistas, prevista para el próximo 9 de abril en primera convocatoria, y al que ha tenido acceso La Información, el asesor de voto recomienda votar en contra de tres puntos. Entre ellos figura el rechazo a la reelección por tres años de Rafael Domínguez de la Maza como dominical, cargo que ostenta en representación de Indumenta Pueri (la familia Mayoral) desde 2022, así como el nombramiento de César Bedoya Merino elegido por Tomás Olivo, que se ha hecho un hueco en el capital con alrededor de un 10%. El empresario murciano figura como segundo accionista del grupo malagueño por detrás de la Fundación Unicaja, que ostenta el 30%, mientras que el grupo textil controla un 5%.
Desde ISS explican que si salen adelante en votación, la independencia del consejo de administración será del 47%, frente al 50% establecido para este tipo de compañías. En el momento actual, el máximo órgano de gobierno corporativo del grupo malagueño está integrado por seis independientes, de los cuales Carolina Martínez Caro, Rocío Fernández Funcia y Antonio Carrascosa Morales se someterán a reelección hasta 2027.
Desde ISS explican que si salen adelante en votación, la independencia del consejo de administración será del 47%, frente al 50% establecido para este tipo de compañías. En el momento actual, el máximo órgano de gobierno corporativo del grupo malagueño está integrado por seis independientes, de los cuales Carolina Martínez Caro, Rocío Fernández Funcia y Antonio Carrascosa Morales se someterán a reelección hasta 2027.
A estos hay que sumar los dominicales, que ascenderán a siete si los accionistas votan avalan a Bedoya Merino. En total, el consejo pasará a estar conformado por quince miembros con Jordi Sevilla como presidente e Isidro Rubiales en calidad de consejero ejecutivo. Cabe recordar que hasta la celebración de la junta sigue vacante el hueco que dejó Manuel Azuaga tras su dimisión una vez culminada la fusión con Liberbank.
Además de los citados, también se encuentra la Fundación de la Caja de Ahorros de Asturias (6,56%), además de Santalucía (5,17%). En cambio, la presencia de los grandes fondos de inversión es más reducida, siendo Vanguard uno de los más relevantes con un 2,1%. El otro voto en contra va enfocado en la delegación al consejo de administración para emitir bonos convertibles en acciones por un máximo de 500 millones con atribución para aumentar capital en la cuantía necesaria, así como de excluir el derecho de suscripción preferente de los accionistas, al considerar que supera los límites establecidos.
Por el contrario, avalan el resto de cuestiones, entre las que destacan la política de remuneración, que incluye el reparto de 344 millones en concepto de dividendo con cargo a las cuentas de 2024 o lo que es igual a 13,4 céntimos, el montante más alto de su historia. De esta cantidad, 135 millones ya fueron abonados el pasado mes de noviembre. Habría que añadir otros 190 millones como pago complementario, equivalentes a 0,07383 euros brutos El orden del día contempla el refrendo a las cuentas de 2024, en las que Unicaja duplicó beneficios con unas ganancias históricas de 573 millones, frente a los 267 millones, cuando se vio lastrada por los saneamientos acometidos. La entidad aprovechó la presentación de los resultados para dar a conocer su plan estratégico a tres años (2025-2027) con el que buscan impulsar la rentabilidad de manera sostenida en el tiempo, pero también reforzar el área de banca minorista y el segmento de empresas mediante la ampliación del catálogo de productos.