Así lo refleja el nuevo indicador de gasto a tiempo real que ha presentado este martes BBVA Research. Los datos, que proceden de las diferentes operaciones de pago que realizan los clientes del banco —previamente anonimizadas—, reflejan que el consumo empezó 2025 al alza hasta alcanzar un pico de crecimiento interanual superior al 5% en términos reales en febrero.
Tras registrar fuertes oscilaciones en marzo y abril —causadas por el efecto de la Semana Santa en el calendario, que cayó en meses distintos en 2024 y en 2025— el gasto se estabilizó en el entorno del 3% en los meses de mayo y junio. A partir de esa fecha, el consumo siguió creciendo, pero lo hizo a un ritmo cada vez más bajo hasta caer en terreno negativo en septiembre. Tras el bache observado en septiembre, el consumo volvió a crecer hasta situarse en el entorno del 2% de incremento en noviembre. La estadística que ha presentado este martes BBVA permite monitorizar cómo ha evolucionado el consumo con gran nivel de detalle y prácticamente a tiempo real. Una fórmula pionera que se suma a otras series de alta frecuencia como los datos de facturación de IVA de la Agencia Tributaria. La estadística profundiza en las grandes categorías de productos de consumo y en el plano territorial ofrecen información incluso para las grandes ciudades.
Según se desprende de la estadística, a comienzos de noviembre, el consumo está tirando especialmente en transporte (crece un 7,3%), moda (6,4%), salud (5,4%), mobiliario (4,2%), educación (3,6%) y ocio (2,1%). En cambio, se reduce en alimentación (-0,4%), alcohol y tabaco (-2,5%), hostelería (-3,3%), comunicación (-4,3%) y hogar (-10,1%).
