El problema es que esos convenios son minoría. De los 3.385 textos que recoge la estadística del Ministerio de Trabajo, difundida este jueves, solo 1.041 se han actualizado en 2023. Los 2.344 restantes tienen efectos económicos este año, pero no se han revisado, así que progresan a un ritmo inferior, del 3,16%. Con una mirada para el total de trabajadores, los salarios se incrementan un 3,49%, mientras que los precios han crecido en el mismo periodo un 3,59%. Así, según esta estadística, los trabajadores pierden una décima de poder adquisitivo, después de dejarse más de cinco puntos en 2022.
El 4,14% de incremento de los convenios firmados en 2023 afecta a 3,6 millones de trabajadores, un tercio de los 10,6 millones cuya situación salarial analiza la estadística de convenios colectivos. Para los otros siete millones las retribuciones crecen un 3,16%. El panorama también difiere en función del tipo de convenio: los de empresa (la menor parte) firmados en 2023 evolucionan un 3,74% y 3,25% en general; los de ámbito superior crecen más, un 4,15% en lo que llevamos de año y un 3,5% en global.
La subida global del 3,49% en lo que llevamos de año es la segunda mayor desde que empezaron los registrarse en 2001, solo la supera el 3,6% de 2008. Sin embargo, este incremento no está sirviendo para que los trabajadores ganen poder de compra. La media de las tasas interanuales de inflación de enero a noviembre se sitúa en el 3,59%. Es casi un empate, pero el año pasado ganaron los precios con mucha diferencia. Crecieron un 8,4%, frente al 3,01% de las nóminas.
Ese desfase supuso el mayor retroceso desde que hay registros de los salarios reales en España, la novena caída más profunda entre los 38 miembros de la OCDE. Así, aunque los salarios no mengüen este año, aún no recuperan lo perdido durante los peores meses de la inflación. El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, auguró recientemente que el poder adquisitivo de los españoles no se recuperará al menos hasta 2026.
El pacto salarial marca un camino de subida de otro 3% en 2024 y el mismo incremento en 2025, ambos susceptibles de sumar un 1% extra si la inflación supera esas subidas el año anterior. Si se cumplen las previsiones del Fondo Monetario Internacional, esa senda tampoco serviría para ganar poder adquisitivo en 2024, ya que la inflación en España será de un 3,9%. Según el Banco de España 2023 terminará en un 3,6% de media y el año que viene, en un 4,3%.