«La trayectoria de nuestra política monetaria está clara: si se confirman nuestras previsiones, seguiremos haciendo menos restrictiva nuestra política monetaria», ha señalado este martes 26 de noviembre en una entrevista al medio finlandés Helsingin Sanomat. El BCE presentará en su reunión de diciembre las proyecciones macroeconómicas actualizadas, después de que en septiembre los funcionarios del organismo mantuvieran la inflación en el 2,5% para 2024, el 2,2% para 2025 y el 1,9% para 2026.
Según explica De Guindos, el elemento clave de cara a una futura bajada de tipos es la inflación de los servicios, que en la actualidad se sitúa en el 4% y está estrechamente ligada con la evolución de los salarios. «Así pues, si la inflación de los servicios empieza a desacelerarse, creemos que la inflación convergerá constantemente hasta el objetivo». De Guindos ha señalado que, en la situación actual de incertidumbre, es difícil hacer predicciones sobre el número y la magnitud concretos de los recortes y repitió que, por eso, es tan importante el enfoque reunión a reunión y dependiente de los datos del organismo. En cualquier caso, ha afirmado que está claro que seguirán haciendo menos restrictiva la política monetaria, ya que la inflación se está acercando a su objetivo del 2% a medio plazo.