El interés de los inversores particulares por comprar deuda española ha sido tal que el Banco de España se ha visto obligado a habilitar la solicitud de cita previa para el servicio de cuentas directas, que son las cuentas de valores abiertas por los ciudadanos en el Banco de España para mantener la deuda del Estado y el paso imprescindible para comprar este tipo de papel de forma presencial a través de sus oficinas.
Este servicio de cita previa arrancará el próximo 7 de febrero, solo unos días antes de que tenga lugar otra nueva subasta de letras a 6 y 12 meses, donde la rentabilidad de la deuda a un año podría superar el 3%.
Desde el organismo supervisor explican que esta medida se ha tomado como consecuencia del aumento de la demanda. Con la cita previa “se pretende ordenar la gestión de las cuentas directas y reducir los tiempos de espera”. Y, aunque todavía faltan varios días para que la solicitud sea la única manera para comprar letras y bonos del Tesoro en las sucursales de la entidad, la disponibilidad de las franjas horarias que quedan es un termómetro del interés que sigue habiendo entre los particulares por este tipo de inversión así como del éxito de la iniciativa. En el caso de Barcelona, para el día 7, fecha de arranque del servicio, el cupo está completo; y en Valencia y Madrid sucede lo mismo.
También quedan pocas franjas en las sucursales del Banco de España situadas en Sevilla, Zaragoza y Valladolid. En la capital andaluza la ocupación es de tres cuartas partes del total ofertado, mientras que quedan alrededor de la mitad para el resto de las capitales mencionadas. Para el día siguiente, en Barcelona, por ejemplo, ya están ocupados todos los horarios disponibles, mientras que en Valencia el ritmo de solicitudes también es elevado.
El Tesoro Público encara una nueva subasta de Letras a seis y un año, en el que se esperan que las rentabilidades sigan al alza. Especialmente porque el Banco Central Europeo subirá los tipos de interés este jueves, en la reunión del Consejo de Gobierno, la primera de 2023 y también la primera después del parón navideño. En dicho encuentro, el mercado espera que el organismo que rige la política monetaria de la eurozona incremente los tipos de interés en medio punto, hasta el 3%, con el objetivo de controlar una inflación que sigue estando por encima de los objetivos de la institución. Esto hará que las Letras del Tesoro sigan mejorando la rentabilidad que ofrecen. En el caso del papel a un año, se podría superar el 3% en la próxima subasta, que según la web del Tesoro, tendrá lugar el próximo 10 de febrero. En la anterior, el interés se situó en el 2,983%, esto es un 20,57% más que el 2,474% de la subasta de diciembre, mientras que para 6 meses, el tipo en enero fue del 2,584%, frente al 2,092% de final de año.
Todo tiene su origen en la resistencia de la banca a remunerar los depósitos, Esto ha hecho, que la compra de letras entre los particulares se haya disparado y a cierre de octubre, último dato publicado por el Tesoro Público, cuenten con 321 millones de euros invertidos en este tipo de deuda, lo que supuso un salto frente a septiembre del 224%.
Además, las letras se pueden comprar sin apenas comisiones, un minúsculo cargo del 1,5%, con un mínimo de 0,90 euros y un máximo de 200 euros, y con la seguridad de ser deuda respaldada por el Estado. No hay que olvidar que la prima de riesgo está anclada en mínimos en torno a los 100 puntos. Además, el importe exigido también es accesible para pequeños inversores, ya que se pueden comprar desde 1.000 euros (y múltiplos de 1.000 euros). Para adquirirlas de forma presencial será necesarios la previa apertura de una cuenta directa y para ello habrá que presentar el NIF.