Aunque el mercado atisba otra subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo en septiembre, después de la insistencia de Christine Lagarde en la cumbre de Jackson Hole sobre su objetivo de inflación del 2%, se cree que el final del ciclo del endurecimiento monetario está cerca.
Así, el euríbor ha cotizado algo errante durante este mes veraniego, con algún movimiento brusco, pero tirando a la baja, tocando mínimos mensuales en el 4,045% cuando hace apenas unas semanas rozaba el 4,2%. Con todo, las cuotas hipotecarias ligadas al indicador de referencia todavía no notarán alivio, dado que hace justo un año la media era bastante menor (1,249%). Así, para un importe de 180.000 euros a 25 años con un diferencial del 1% sobre el euríbor, la letra mensual pasará de 785 euros a 1.060 euros, lo que supone 275 euros más al mes o 3.300 euros adicionales al año. En el caso de una cantidad pendiente de 150.000 euros, el encarecimiento de la cuota será de casi 200 euros al mes o unos 2.400 euros anuales. Para 300.000 euros, la factura mensual aumentará unos 450 euros y la anual, más de 5.500 euros.
El euríbor entró en positivo en abril de 2022 por primera vez en seis años y ha ido subiendo hasta superar el 4% el pasado junio.