En declaraciones a La Sexta, ha defendido que la Ley de Amnistía ha sido «un paso adelante para garantizar la convivencia y para superar la mayor quiebra que ha tenido nunca España». «Yo estoy convencido que en el camino final se acabará aplicando y será constitucional, que es lo que siempre hemos defendido», ha subrayado.
En la misma línea se muestra convencido de que «la Ley avanzará con toda normalidad, cumplirá su objetivo» que pasa por «superar la judicialización» de un problema que «nunca se debería haber judicializado» y por el contrario debería haber tenido «una respuesta política», sostiene.
Por tanto insiste en que no comparte la decisión del Supremo y además reprocha que este «se atribuye comentarios políticos que no vienen al caso, porque la política ya decidió», ha apuntado.