Aprovechando un hecho histórico, como es el levantamiento del cuartel de San Gil de Madrid en contra de las políticas de Isabel II se relata en plan folletinesco, el encuentro de los dos protagonistas que tienen que acabar exiliándose a Cuba ya que son perseguidos por la Policía por un asesinato: una es una corista (suripanta) y el otro un estudiante de medicina. Los dos en una sola noche se enamoran.
El folletín va a continuar en Cuba, a la que llegan por caminos distintos pero que se van a encontrar de una manera un tanto teatral. Uno acaba en un ingenio azucarero al que llega pensando en un trabajo exitoso y acaba como un esclavo más de la plantación, la otra convertida en una gran dama local. Se acabarán encontrado y ahí comenzará realmente la novela criticando la explotación de los esclavos africanos y de los trabajadores chinos y gallegos que llegan a la isla engañados. Los grandes terratenientes viven lujosamente y a la vez en la isla hay una pobreza notoria en la mano de obra.
La interpretación histórica de esos momentos en las plantaciones de Cuba es una reelaboración de la realidad al gusto actual, por lo que difícilmente se le podrá considerar novela histórica, que otra parte las hay y buenas narrando esos momentos en las Antillas.
Pero queda la trama propia de las novelas de este trio y que son los asesinatos de unos personajes importantes y que aparecen muertos con los cráneos trepanados: el demonio existe y aquí está presente. A partir de aquí, aventuras, escenas de un terror lleno de imaginación y un desenlace a lo Mola.
Los personajes, aunque están bien trazados son muy estereotipados, poco elaborados. En su conjunto: una novela para el entretenimiento, con dosis de sexo y todos los ingredientes que pide una novela comercial en estos momentos.
El infierno
Carmen Mola
Planeta, (2023)
477 págs.
ISBN: 978-84-08-27758-3