En concreto, el banco de inversión espera que el barril de referencia en Europa se sitúe en 86 dólares en diciembre, frente al pronóstico anterior de 95 dólares; mientras que para el barril West Texas, de referencia en Estados Unidos, esperan que alcance los 81 dólares, en comparación con los 89 dólares de su perspectiva previa. Esta revisión a la baja se ha producido a pesar del recorte voluntario de 1 millón de barriles diarios a partir de julio anunciado por Arabia Saudí, tras la reunión de la OPEP+, y en la que el cartel decidió mantener sus objetivos para este 2023.
Desde el banco creen que es poco probable que los recortes adicionales implementados por Arabia Saudí tengan como consecuencia un aumento de los precios, incluso cuando la producción del reino verá una disminución hasta los 9 millones de barriles por día, frente a los cerca de 10 millones de barriles que bombea en la actualidad. «El recorte adicional de Arabia Saudí y nuestra expectativa de que la OPEP+ extenderá la mitad de su recorte voluntario de abril en 2024 probablemente solo compensará parcialmente estos choques bajistas», explican desde Goldman Sachs. «Los importantes golpes de oferta de Irán y Rusia han llevado el posicionamiento especulativo a mínimos históricos», han señalado los analistas.
En este sentido, destacan en su informe que la producción de petróleo de Rusia se ha mantenido resistente incluso frente a las sanciones impuestas por Occidente, lo que ha llevado al banco a revisar al alza las previsiones de suministro de crudo de aquellos países que se enfrentan a penalizaciones con «actualizaciones de 2024 para Rusia, Irán y Venezuela de 0,4 / 0,35 / 0,05 mb / d, respectivamente».
«Después de una fuerte caída inicial de 1,5 millones de barriles por día, el suministro ruso se ha recuperado casi por completo a pesar de la decisión de muchas compañías de dejar de comprar sus barriles», señalan los economistas de Goldman. Este lunes los precios del petróleo caen cerca de un 3% con el Brent cotizando a 72,82 dólares y el West Texas a 68,04 dólares, en una sesión en la que los inversores esperan para conocer los últimos movimientos de política monetaria de la Reserva Federal (Fed), el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Japón (BoJ), cuyas reuniones tendrán lugar el miércoles, el jueves y el viernes, respectivamente.