El futuro a un mes sobre el barril Brent, la referencia del Mar del Norte, se eleva un 5%, hasta los 84 dólares, su nivel más alto desde principios de marzo, mientras que el estadounidense West Texas (WTI) cotiza por encima de los 79 dólares con un ascenso de la misma cuantía. El nuevo recorte de producción se une a los 2 millones de barriles (mbd) que se puso en marcha en noviembre por parte del cártel de productores pero que no ha logrado estabilizar los precios.
El cambio se produce antes de una reunión virtual de un panel ministerial de OPEP+ que busca poner freno a las caídas recientes de precios. En concreto, Arabia Saudí aplicará una reducción adicional de medio millón de barriles diarios; Emiratos de 144.000 barriles diarios; Kuwait de 128.000 barriles; Irak de 211.000; y Omán de 40.000. Kazajistán reducirá la producción en 78.000 barriles diarios. Rusia, por su parte, extenderá el recorte de su producción adoptado el año pasado, de 500.000 barriles, hasta final de 2023
«La participación de los miembros más grandes de OPEP+ sugiere que el cumplimiento de los recortes de producción puede ser más fuerte que en el pasado. Eso significa que los mercados petroleros pueden ver potencialmente alrededor del 1 por ciento del suministro mundial de petróleo o más siendo reducido a partir de mayo», explica Vivek Dhar, analista de energía en CBA, en declaraciones a la agencia ‘Reuters’.
Los precios del petróleo se dispararon cuando Rusia invadió Ucrania, pero ahora las cotizaciones están de vuelta en los niveles no vistos desde antes de que comenzara el conflicto. Por su parte, EEUU ha estado pidiendo a los productores estadounidenses que aumenten la producción para hacer bajar los precios de la energía, al tiempo que la Administración Biden ha liberado gran parte de sus reservas estratégicas de crudo. Los altos precios de la energía y combustibles fueron dos grandes motores para la inflación en 2022 y descenso desde máximos ha ayudado a reducir los niveles de crecimiento del IPC en 2023.
En su último gran movimiento en 2022, los ministros de la OPEP+ acordaron consolidar una rebaja en la oferta de crudo desde noviembre de 2 millones de barriles diarios (mdb), de 43,85 a 41,85 mdb, frente a los 43,856 millones de agosto de 2022. De esta cantidad, alrededor de dos tercios está controlado por la antigua OPEP sin Rusia ni otros países productores.
Los países miembros decidieron en febrero ajustar la frecuencia de las reuniones mensuales para que sean cada dos meses en el caso del Comité Conjunto de Seguimiento Ministerial (JMMC), mientras que las cumbres ministeriales OPEP y no OPEP serán cada 6 meses. De este modo, los ministros de los países exportadores de crudo no volverán a reunirse en principio hasta junio, mientras que el JMMC se reunirá nuevamente este lunes 3 de abril.