Cada uno de ellos ha tenido una misión, un cometido concreto y todo apunta a que lo realizaron con bastante eficacia y algunos de ellos, incluso lograron eso que se llama beneficio personal de distinto volumen o monto, pero de todo ello el presidente, su líder el que los nombro, y ceso, no sabía nada.
Todo ello conforme va saliendo a la luz ha generado no pocos problemas al propio muñidor y creador de los equipos, que insisto no es otro que el propio líder.
Lo peor de todo es que lo que empezó siendo un pequeño problema por la estrechez de algunos jueces, paso a convertirse en escandalo a nivel nacional con amplia repercusión en medios propios y ajenos, Queremos decir, partidarios y no partidarios de don pedro y su gestión, porque lo de la propiedad no tiene nada que ver con el accionariado, sino mas bien con el posicionamiento que los directores hacen en sus informaciones y comentarios al respecto.
Y ya el colmo de los colmos es que ya toda la prensa internacional habla de los problemas de Sánchez en España y su intento de que los líos que esta montando a propósito de la OTAN y la aportación de cada pais le facilite la recuperación de su iniciativa política interna, lo cual parece cada día mas complicado.
La realidad es que los escándalos son de tal tamaño y han sido tan mal gestionados que es difícil que tarde o temprano salte la liebre y se rompa el gobierno de coalición que le sustenta desde hace dos años. Su debilidad parlamentaria le obliga a ceder cada paso que da y ha llegado el momento en el que la chistera de los regalos esta vacía. Las palomas se han acabado y los problemas son cada vez mas gruesos.
Muchos hablan ya de una nueva era, el post-sanchismo, pero eso de momento esta por ver, aunque lo que hace meses parecía imposible ya no lo es y se ha convertido en charla de café y eso es lo peor que le puede pasar a un Gobierno, que todo su quehacer se reduzca a especulaciones de cuando , como y de que manera se va a acabar, porque eso supone, efectivamente, el acabose político o como diría aquel otro eso es “la muerte pela”