El incremento de precios y el tirón de la demanda procedente del turismo y la hostelería contrarrestan el debilitamiento del consumo en hogares. El sector mantiene un alto grado de concentración de la oferta. Los diez primeros grupos concentran ya cerca del 75% del valor del mercado. Según el Observatorio Sectorial DBK tras la fuerte caída de las ventas registrada en 2020, en el bienio 2021-2022 el mercado de bebidas espirituosas registró una significativa recuperación, de forma que al final de ese período ya había superado el valor alcanzado en 2019. Así, el valor de las ventas en España registró un notable aumento en 2022, en un marco de fuerte crecimiento de la demanda de hostelería y restauración, favorecido por el dinamismo del turismo, a lo que se unió el aumento de los precios. El mercado se situó en 2.100 millones de euros, un 23,5% más que en 2021, año en el que había aumentado un 13,3%.
Destaca el fuerte crecimiento del comercio exterior en 2021 y 2022. Así, el valor de las exportaciones de bebidas espirituosas creció un 23,6% en el último año, cifrándose en 1.067 millones de euros, mientras que el de las importaciones aumentó un 43,4% hasta alcanzar los 1.024 millones de euros, registrando el sector un superávit comercial que se situó en 43 millones de euros.
Para el cierre de 2023 se estima una significativa ralentización del crecimiento del valor del mercado, ante la debilidad del consumo privado. El aumento de precios, el repunte del negocio en hostelería y el dinamismo del turismo permitirán compensar el deterioro del consumo en hogares. Así, para el cierre de 2023 se prevé un valor del mercado de unos 2.200 millones de euros, con un crecimiento algo inferior al 5%.
Por su parte, el estancamiento de las exportaciones y el incremento de las importaciones en torno al 8% en 2023 provocarán un deterioro de la balanza comercial con el exterior en este año.
En el sector operan unas 300 compañías dedicadas a la elaboración de bebidas espirituosas, las cuales generan un volumen de empleo de más de 3.000 trabajadores. La mayor parte son empresas de carácter familiar y de origen nacional, predominando las empresas de pequeño tamaño, si bien en las primeras posiciones del mercado se sitúa un número reducido de grandes grupos fabricantes/importadores. Los cinco primeros competidores reunieron el 61% del mercado en 2022, mientras que los diez primeros concentraron cerca del 75%.