En deuda a tres años se han colocado 2,139,27 millones al 3,441%, superior al 2,928% de la puja anterior, y la rentabilidad más elevada desde noviembre de 2012. En obligaciones a siete años se han adjudicado 1.475,05 millones con un interés marginal del 3,527%, frente al 3,212% de la subasta anterior. En este caso el rendimiento exigido ha sido el más alto desde junio de 2013.
La subasta la completan las referencias a 10 años y bonos indexados a la inflación. En deuda con vencimiento en 2033 el Tesoro ha vendido 2.363,89 millones al 3,773%, el rendimiento más elevado desde enero de 2014. La rentabilidad exigida a España se sitúa en línea con la cotización del bono a 10 años en el mercado secundario. En sintonía con el conjunto de la deuda de la zona euro, las expectativas de mayores subidas de tipos se están traduciendo en un incremento de las rentabilidades. La deuda española con vencimiento en 2033 cotiza a día de hoy en el 3,676%, niveles que no se veían desde comienzos de 2014, mientras el bono alemán al mismo plazo se sitúa en el 2,7%, máximos de junio de 2011. En obligaciones a 15 años indexadas a la inflación en la que se han colocado 502,9 millones al 1,176%, superior al 1,032% previo.