La demanda de los inversores ha superado de nuevo ampliamente el importe colocado en los mercados y en la subasta de este martes las peticiones han sobrepasado los 5.659 millones de euros, más del doble de la cantidad adjudicada.
En concreto, el departamento dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos ha colocado 550,25 millones de euros en letras a 3 meses, frente a una demanda de 2.231,40 millones de euros, y el interés marginal ofrecido se ha situado en el 3,490%, por debajo del 3,535% de la subasta previa de agosto, cuando se alcanzó el porcentaje más alto desde noviembre de 2011.
En las letras a 9 meses, el Tesoro ha adjudicado 1.763,01 millones de euros, por debajo de los 3.428,35 millones solicitados por los inversores, a una rentabilidad marginal del 3,737%, ligeramente por encima al 3,700% ofrecido en la emisión previa. No consigue alcanzar el 3,810% ofrecido en la emisión del pasado 11 de julio, cuando se logró la mayor rentabilidad de esta referencia, lanzada en febrero de 2013.
La mejora de los intereses ofrecidos, en línea con las últimas subidas de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), ha mantenido el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles.
Así, los inversores particulares están mostrando gran interés por la compra de deuda, principalmente a corto plazo, dada su alta rentabilidad, que ha ido creciendo desde inicios de 2022, especialmente en el caso de las letras a más corto plazo. Tras la subasta de este martes, el Tesoro volverá a los mercados el jueves 21 de septiembre con una emisión de bonos y obligaciones del Estado con la que cerrará el mes.
La emisión bruta por parte del Tesoro Público será este año de 256.930 millones de euros, lo que supone un aumento del 8,2% respecto a lo estimado para 2022, debido al alza de los tipos de interés. Por su parte, el endeudamiento neto del Tesoro Público en 2023 se mantendrá en 70.000 millones. Desglosando por tipo de instrumento, se prevé que las Letras del Tesoro aporten financiación neta negativa por 5.000 millones, por lo que los bonos y obligaciones del Estado, junto con el resto de las deudas en euros y en divisas, aportarán los 75.000 millones restantes.