Todo se resume en que si Sánchez no cambia de estrategia la llamada izquierda tiene poco que hacer y puede ver reducida su influencia a la mínima expresión y su presencia en los circuitos del poder experimentar una caída en picado que puede hacer desaparecer a muchos de los corpúsculos que hoy sobreviven gracias a la financiación estatal-
Eso ha hecho que en los últimos dias lideres de algunas de esa formaciones emitan sus opiniones en distintos medios, generalmente afines a esas ideas y nos cuenten lo que piensan y como van a actuar en consecuencia para que la izquierda no deje de ser la que “gobierne”, si a eso que hacen desde La Moncloa unos cuantos indocumentados s e puede llamar gobernar
En ese contexto la lideresa Díaz, apostó este lunes por una “alianza democrática” de partidos de izquierdas, pero remarcó que esa unión debe “compartir el diagnóstico de que estamos en una situación de gravedad histórica” y definir un “programa de mínimos muy claro” para la ciudadanía. Según ella misma confeso ante los micrófonos de RNE lleva desde hace “muchísimos años” defendiendo esa idea, porque “vivimos en tiempos de excepción absoluta”, donde “creo que la disputa es democrática, sin ninguna duda”, pero “es muy grave lo que está sucediendo en el país y en el mundo”. En su opinión, la “ola reaccionaria, desde Trump, pasando por Milei, siguiendo por Orban y todas las fuerzas de extrema derecha del mundo, es muy potente” y constató que “hay un elemento sordino que está recorriendo España por la extrema derecha”.
“Me parece que eso requiere una alianza democrática que debe tener ciertas características”, explicó. En primer lugar, detalló, “compartir el diagnostico, y es si estamos en una situación de gravedad histórica, que yo creo que sí”. En segundo lugar, continuó, “señalar un programa de mínimos muy claro para la ciudadanía”, donde se recoja que “queremos subir los salarios, mejorar la escuela pública, la sanidad pública, las pensiones”.
La líder de Sumar remarcó que “esto no va de unas siglas”, sino que “va de algo que movilice el país, que le de fuerzas a las gentes de nuestro país para que digan que esto merece la pena”. “Lo he defendido desde hace muchos años y creo que en estos momentos de gravedad histórica es lo que necesitamos”.
En esta línea pro activa, su idea, “no va de una suma de siglas. Eso no moviliza a nadie. Va de un proyecto de país. Estamos mejorando desde el Gobierno de España la vida de la gente trabajadora en España, donde se ha reducido la desigualdad por herramientas tan potentes como el Salario Mínimo o la Reforma Laboral. Para eso estamos aquí”,
Así, que todos preparados para cuando nos manden llamar y prietas las filas salvemos a esta izquierda de la pasarela que tanto gusta de fotos y poses, pero que no quiere trabajar.