En un solo día, el euríbor ha borrado de un solo plumazo la subida de enero. El índice más perseguido por los hipotecados ha dado una buena alegría al desplomarse un 3,3%.
La caída de este lunes de 8,3 puntos básicos no se registraba desde el pasado seis de agosto, y es que ha vuelto de repente a situarse por debajo del 2,5%. En concreto, se ha situado en el 2,436%, en niveles de diciembre.
La cotización del euríbor la decide un panel de bancos europeos, que fijan el «precio» al cruzarse la información de los préstamos interbancarios a un plazo de doce meses el día antes. En la práctica, el euríbor funciona como un bono en los mercados financieros. Hoy la rentabilidad de las grandes referencias del mercado, como el bund alemán o los bonos franceses, caen con fuerza, igual que el interés del euríbor.