Este ha sido el diagnóstico que ha verbalizado el Rey Felipe VI al clausurar el XXVII Congreso de la Empresa Familiar celebrado en Santander. «Si se puede favorecer en Europa un entorno más sencillo y atractivo para las inversiones y el empleo, la energía social y el compromiso de empresas como las familiares seguramente harán el resto» ha sostenido el monarca.
Felipe VI ha recogido el análisis elaborado minutos antes por el exprimer ministro italiano, Letta, en el que ha resumido el contenido del informe en el que propone soluciones para la pérdida de competitividad de Europa frente a China y EEUU. «En un contexto económico complejo, os enfrentáis a una presión creciente para adaptaros y diferenciaros. Es aquí donde aspectos clave como la incorporación de talento, la apertura a la innovación y la adopción de tecnología tienen un rol crucial» ha señalado el Rey. «Si el objetivo es mantenerse y prosperar, el camino es adaptarse. Lo habéis hecho en épocas pasadas y más recientes, y estoy seguro de que lo seguiréis haciendo» ha señalado el Rey.
Con una intervención que ha dado cierre al encuentro de más de 600 empresarios en la capital cántabra, el monarca ha puesto en valor el peso de la empresa familiar para la economía española, donde es el principal empleador del sector privado. «Desempeñáis un papel clave en la estabilidad y bienestar, de empleados o clientes, pero también de la sociedad en general» ha subrayado. Actualmente, estas compañías representan el 90% del tejido empresarial español, el 70% del empleo y el 60% del valor añadido del PIB a través de firmas como Estrella Galicia (Hijos de Rivera) que ahora ostenta la presidencia, Inditex o Mercadona.
«Las empresas familiares sois el motor que mueve nuestra economía y el principal empleador del sector privado» ha resaltado Felipe VI, poniendo de relieve la proyección a futuro que tienen estas compañías basada en la confianza. «Yo soy positivo» ha sostenido en relación con los retos que afronta Europa a medio plazo que vienen dados fundamentalmente por la transición energética y la digital. Además, ha destacado que las empresas familiares son la prueba de que se puede ganar presencia en el extranjero sin renunciar o dejar de cuidar los orígenes, como el Banco Santander que también ha intervenido esta mañana.
«A pesar de los desafíos y costes adicionales que conlleva todo proceso de expansión, existen compensaciones significativas que hacen que la ecuación «origen y competitividad» sea viable, porque no contempláis estos conceptos como opuestos, sino como fuerzas complementarias» ha celebrado el jefe del Estado, quien también ha incidido en la necesidad de «hacer un esfuerzo para ganar en productividad y en competitividad» como aspectos clave para el crecimiento de estas compañías y para ganar relevancia en el mercado internacional.
La competitividad ha centrado toda la exposición del académico italiano, quien ha señalado las complicaciones derivadas de haber llevado a cabo una separación del sector financiero, el de telecomunicaciones y el de seguridad del mercado único europeo. Un aspecto al que también se ha referido el presidente del Instituto de la Empresa Familiar, Rivera como pieza fundamental en el medio plazo para hacer frente a los competidores chinos y norteamericanos. En este sentido, al atender a los medios de comunicación, ha reclamado una normativa más favorable, por entender que ya se han alcanzado «ciertos límites».