Según ha informado este jueves la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la operación le reportará unos fondos netos de aproximadamente 496 millones de euros, que prevé destinar a atender “necesidades corporativas generales”. El precio de emisión será del 99,587% del valor nominal de los bonos y el ciere y desembolso de la misma se realizará previsiblemente en torno al 13 de septiembre de 2023, una vez cumplidas las condiciones suspensivas habituales en este tipo de emisiones.
Las entidades colocadoras de esta emisión han sido HSBC, Sabadell, BBVA, Bank of America, Citi, JPM, MUFG Bank, RBC Capital Markets y Santander, según adelantó ayer ‘Bloomberg’ citando fuentes del mercado. La orden de libros superó los 950 millones de euros entre clientes profesionales, a los que se ha dirigido exclusivamente la oferta.
La última gran operación de deuda anunciada por la compañía la protagonizó el pasado mes de agosto, cuando amortizó de forma anticipada unos bonos híbridos por un importe de 471,44 millones de euros, como parte de la fusión entre la matriz española y su filial en Países Bajos. La deuda bruta total consolidada de la compañía ascendía a primeros de 2023 a 11.497 millones de euros, con una posición neta de tesorería, excluyendo proyectos de infraestructura, de 1.343 millones de euros. Dentro del calendario de deuda, en 2024 vencen 302 millones de euros, en 2025 cerca de 760 millones y a partir de 2026 otros 1.867 millones de euros. Su liquidez ronda los 5.850 millones de euros.