Este negocio de financiación al consumo, que depende en un 51% de Santander y en un 49% de El Corte Inglés, logró un aumento del 5,6% en el margen de interés, hasta alcanzar los 127,3 millones de euros, mientras que el margen de bruto se elevó un 3,6% hasta los 171,8 millones de euros. Parte de este aumento se basa en el incremento que ha experimentado la cartera crediticia de la alianza, especializada en crédito al consumo: a cierre de 2024, sumaba un volumen de 1.977 millones de euros, por encima de los 1.870 millones de euros en créditos a la clientela que tenía en 2023. Por el contrario, los gastos administrativos se redujeron durante 2024 un 2,7%, situándose en 53,7 millones de euros. Dentro de este capítulo, los costes de personal se elevaron ligeramente, un 1%, alcanzando los 28,5 millones de euros.
La alianza de ambos socios en este negocio de financiación al consumo, en el que se incluye productos como por ejemplo la Tarjeta de El Corte Inglés, ya ha sumado diez años y alrededor de 620 millones de euros de beneficios. La historia conjunta se inició en octubre de 2013 cuando ambas compañías llegaban a un acuerdo estratégico por el que Santander Consumer Finance (SCF), la filial de financiación al consumo del banco, adquiría el 51% de Financiera El Corte Inglés. Este acuerdo, que acabó formalizándose en 2014, supuso un desembolso por parte de Santander de 140 millones de euros en pago por ese 51% de la sociedad y un dividendo extraordinario, abonado antes del cierre de la operación, de otros 140 millones de euros a El Corte Inglés.