Esta mejora se ha visto impulsada por el crecimiento del volumen de ventas, la expansión de márgenes y el progreso en su programa de eficiencia. Las ventas alcanzaron los 1.227 millones de euros, un incremento del 5%, con crecimiento en todas las regiones a tipo de cambio y perímetro constantes. Norteamérica lideró con un aumento del 8% y Europa creció alrededor del 3%. Las ventas en el Resto del Mundo avanzaron un 7%.
El EBITDA ajustado ascendió a 314 millones de euros, un 6% más que en el primer semestre de 2024, lo que representa un margen del 25,6%. Esta mejora refleja el impacto positivo del Programa de Simplificación, que ha acumulado 84 millones de euros de ahorro hasta la fecha y avanza en línea con el objetivo de 100 millones a finales de año. Las iniciativas en eficiencia de compras y reducción del coste del producto están siendo clave en esta evolución.
Además, Fluidra sigue reduciendo su endeudamiento. A cierre de junio, la ratio de deuda neta sobre EBITDA ajustado se situó en 2,3 veces, 0,3 puntos menos que hace un año.
En relación con la política comercial internacional, Fluidra ha puesto en marcha un plan de acción frente al impacto de los aranceles, trabajando estrechamente con sus proveedores para reorganizar la cadena de suministro y reducir la base de costes. Además, en abril aplicó subidas de precios en Norteamérica, y ya prepara nuevos ajustes para la próxima temporada. La compañía confía en compensar completamente el efecto de los aranceles a lo largo de 2025.
Con estos resultados y un entorno comercial sólido, Fluidra ha reafirmado su previsión para el conjunto del ejercicio 2025, con una estimación de ventas entre 2.160 y 2.220 millones de euros, un EBITDA ajustado entre 500 y 520 millones de euros y un beneficio por acción ajustado entre 1,33 y 1,40 euros.