Así, el Panel de Funcas prevé que el PIB crezca un 0,5% en el segundo trimestre, una décima menos que en el primero, otro 0,5% en el tercero y se ralentizaría hasta el 0,4% en el último tramo del año. El resultado es un crecimiento del 2,4% en 2025, una décima menos que en el anterior Panel. Ocho panelistas han modificado su previsión a la baja, mientras que ninguno lo ha hecho al alza. Desde el punto de vista de la composición del crecimiento, la revisión a la baja se deriva de una menor aportación de la demanda nacional. La mayoría de los panelistas ha realizado sus previsiones bajo la hipótesis de que el arancel medio que aplicará EEUU a Europa se situará entre el 10% y el 15%.
Ocho panelistas consideran que el riesgo de previsión es a la baja, es decir, que el PIB podría crecer menos de lo esperado, frente a dos que opinan que el riesgo es al alza. Los nueve panelistas restantes otorgan similar probabilidad a que la desviación sea al alza o a la baja.
La previsión de crecimiento para 2026 se mantiene en el 1,9%. La desaceleración se debería al menor vigor de la demanda nacional, que reduciría su contribución hasta los 1,9 puntos porcentuales, mientras que la aportación del sector exterior sería nula, ambas sin cambios respecto al Panel de mayo.
A pesar de la bajada de la inflación, las presiones en los precios de los alimentos dificultan el proceso de desinflación. Los panelistas prevén que la tasa general suba en los próximos meses, aunque acabaría el año en el 2,2% en diciembre, con una media anual del 2,4% (una décima menos que en el Panel de mayo). Para 2026, se espera una media anual del 2%, y una interanual del 2% en diciembre (sin cambios). La subyacente se revisa a la baja en una décima hasta el 2,2% en 2025, y se mantiene la de 2026 en el 2,1%.
Respecto al mercado laboral, las previsiones de los panelistas experimentan pocos cambios: para 2025 esperan un crecimiento del empleo del 2% (una décima más que en el anterior Panel) y para 2026, un 1,4%. La tasa de paro bajaría al 10,7% en 2025 y 10,4% en 2026, sin cambios desde la previsión de mayo.
La estimación para el déficit público baja una décima para este año, hasta el 2,8% del PIB, mientras que la previsión para 2026 se mantiene en el 2,7%.
La política económica de EE UU sigue marcando la agenda internacional. En este contexto, indicadores como los índices de sentimiento empresarial y de confianza del consumidor apuntan a un deterioro acusado de la coyuntura, expectativas que aún no se han traslado a la economía real. Las valoraciones del Panel reflejan el clima de incertidumbre. Prácticamente todos los panelistas consideran que el entorno global es desfavorable, y que esta situación prevalecerá en los próximos meses o irá a peor.
Según el Panel, el BCE decidirá un nuevo recorte de tipos este año, hasta el 1,75%, y mantendrá ese nivel el próximo ejercicio. Los mercados parecen haber descontado estos ajustes, de modo que el Euribor a un año apenas bajaría desde el entorno del 2%-2,1% actual hasta el 1,9% a finales de 2026.