Por sectores, y siempre en términos desestacionalizados, el empleo descendió en la agricultura, moderó su crecimiento en la industria, mientras que en la construcción y en los servicios mantuvo un crecimiento semejante al mes anterior. En el sector de la hostelería, donde siempre se produce una destrucción importante de empleo en los meses de septiembre, la reducción de la afiliación ha sido sensiblemente más moderada de lo que era habitual en los años anteriores a la pandemia, algo que ya se observó en los meses de septiembre de 2023 y 2022. Esto, unido al hecho, mencionado en anteriores notas, de que el incremento de la afiliación en los meses de primavera ha sido mayor en los últimos años que en su media histórica, parece apuntalar la idea de que se ha producido un cambio en el comportamiento estacional de este sector, que obliga a interpretar las cifras desestacionalizadas con cautela, no solo las
de su sector sino también las del conjunto de la economía.
Con todo, en el conjunto del tercer trimestre, la tasa de crecimiento de la afiliación con respecto al trimestre anterior se ha ralentizado hasta un 0,5%, desde un 0,7% registrado en los dos primeros
trimestres del año. Este patrón de crecimiento más intenso en los dos primeros trimestres del año y ralentización en los dos últimos se observó también en 2022 y 2023.
El paro registrado ralentiza su descenso en el tercer trimestre
El número de desempleados registrados en septiembre aumentó en 3.164, cifra que una vez corregida de estacionalidad equivale a un descenso de 6.000 –cifras desestacionalizadas por Funcas–.
En el conjunto del tercer trimestre el desempleo registrado se redujo un 0,4%, frente a descensos del 1,9% en los trimestres primero y segundo. El número de contratos firmados en el acumulado del año hasta septiembre se ha reducido un 1,4% en comparación con el mismo periodo del año pasado. Dicha bajada procede de los contratos indefinidos, que cayeron un 4%, mientras que los temporales crecieron un 0,5%, si bien la tendencia más reciente
en ambas modalidades es de estabilidad.
El gasto en prestaciones sigue creciendo más que el número de beneficiarios En los ocho primeros meses de 2024 se mantiene la tendencia iniciada el año anterior de crecimiento en el número de beneficiarios por prestaciones por desempleo, que aumentaron un 1,3% sobre el mismo periodo del año previo, mientras que el gasto en prestaciones creció a un ritmo mayor, un 4%.
La tasa de cobertura continúa su tendencia al alza, y en julio se situó, en términos desestacionalizados, en el 73,8% –frente al 70% en que terminó el año pasado– .